
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con la portavoz de Junts, Míriam Nogueras, en una imagen de archivo
«Sánchez contra España»: la respuesta del PP a la cesión de las competencias migratorias a Cataluña
Junts llevaba persiguiendo durante un año la cesión de las competencias migratorias, reclamando un «traspaso integral»
Psoe y Junts han protagonizado un pacto que desembocará en una nueva cesión del Ejecutivo de Sánchez a Cataluña, otorgando a la Generalitat las competencias en materia migratoria por medio de una nueva ley de migración.
Se produce apenas unos días después de la condonación de más de 17.000 millones de euros de deuda catalana —el 22 % de la que Cataluña había contraído con el Fondo de Liquidez Autonómica—. Aunque, hasta el momento, el líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, guarda silencio, la formación ha criticado el acuerdo a través de la diputada y vicesecretaria nacional de Sanidad y Educación, Ester Muñoz. «Primero quita y cupo: Sus deudas las pagamos todos y sus ingresos se los quedan ellos. Ahora les da el control de las fronteras», señalaba en su perfil de X.
«No necesitaban una declaración unilateral de independencia, necesitaban a un Sánchez rodeado de corrupción y sin mayorías. Sánchez presidente CONTRA España», sentenciaba. Las palabras de la presidenta del PP de León, republicadas por la cuenta del partido, han sido las únicas proferidas desde la oposición sobre este nuevo acuerdo con el separatismo catalán. Tampoco desde Vox se han pronunciado al respecto de una nueva cesión de la que varios expertos consideran manifiestamente inconstitucional.
Un modelo compartido
La cesión de las competencias migratorias se lleva persiguiendo durante un año. Junts permitió en enero de 2024 que el decreto anticrisis del Gobierno viera la luz a cambio de un traspaso de la autoridad migratoria.Los de Carles Puigdemont reclamaban un «traspaso integral» para que fuera la policía autonómica quien asumiera la función en exclusiva. Sin embargo, desde el PSOE señalaban que esa decisión contravenía tanto la Constitución como la normativa europea. Por ello, se ha terminado por aceptar un modelo compartido, por lo que los Mossos tendrán presencia en las fronteras junto a la Policía Nacional y a la Guardia Civil.
De hecho, hace unas semanas se dieron pasos en esta dirección cuando el presidente de la Generalitat, Salvador Illa, pidió al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, una ampliación de la plantilla de los Mossos con 25.000 agentes más. Además, en septiembre asumirán el control de puertos y aeropuertos.