
El ex secretario de Estado de Seguridad Francisco Martínez durante una de sus comparecencias en la Audiencia Nacional
El grupo en el que ha sido detenido el ex número 2 de Interior «operaba como una red de inteligencia privada»
La Policía asegura que se ha podido «salvaguardar información sensible que afectaba a millones de ciudadanos»
La red de robo y venta de información personal en la que ha sido detenido el que fuera número 2 del Ministerio del Interior con Jorge Fernández Díaz, Francisco Martínez, «operaba como una auténtica red de inteligencia privada, con funciones claramente diferenciadas», según deduce la Policía Nacional de la investigación que llevaba a cabo desde 2024.
Explica la Policía que «la red había desarrollado una plataforma tecnológica integrada que permitía almacenar, indexar y comercializar datos segmentados, individualizados y vinculados a personas físicas, entidades jurídicas y operaciones institucionales. Esta capacidad les permitía elaborar perfiles completos, cruzar información en tiempo real y ofrecer servicios personalizados de consulta a terceros, que accedían a través de un bot cifrado en una conocida red social».
En total fueron detenidas cuatro personas, entre las que se encontraba el anterior secretario de Estado de Seguridad, Francisco Martínez, y el hacker José Luis Huertas 'Alcasec'. Uno de los miembros, posiblemente el exsecretario de Estado, desempeñaba un rol clave en esta internacionalización, ampliando las operaciones a terceros países mediante contactos profesionales consolidados.
La red instrumentalizó sus relaciones personales y profesionales para presentarse como un entorno legítimo de asesoramiento tecnológico, blanqueando su operativa mediante estructuras societarias y servicios de «consultoría» que facilitaban su inserción en entornos económicos e institucionales.La rápida actuación de la Policía Nacional ha permitido "la intervención y recuperación de la infraestructura tecnológica de la red. A pesar del uso de identidades falsas, criptomonedas, cifrado extremo y rutas anónimas de acceso, los investigadores consiguieron identificar y desmantelar los servidores principales, así como recuperar las bases de datos alojadas en la nube.
Por lo que se ha podido salvaguardar información sensible vinculada a millones de ciudadanos, entre la que se incluían datos personales procedentes de sistemas educativos, el registro civil, registros de mascotas, abonos de transporte, registros telefónicos y plataformas de facturación de compañías eléctricas.
A los detenidos se les imputan los delitos de organización criminal, descubrimiento y revelación de secretos y blanqueo de capitales.