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El juez Juan Carlos Peinado y la mujer de Pedro Sánchez, Begoña Gómez

El juez Juan Carlos Peinado y la mujer de Pedro Sánchez, Begoña GómezÁngel Ruiz

Tribunales

¿Por qué el juez Peinado está obligado a enviar a Begoña Gómez ante un jurado popular por malversación?

Los ataques del Gobierno al instructor de la causa que se sigue contra la mujer del presidente del Gobierno han tratado de desviar la atención de los relevante: la decisión del magistrado no es opcional, sino obligatoria

«El juez Juan Carlos Peinado está limitándose a cumplir la Ley». El magistrado instructor de la causa penal que se sigue contra Begoña Gómez por un total de hasta cinco delitos diferentes, el juez Juan Carlos Peinado, recibía el apoyo unánime del Poder Judicial tras comunicar a la mujer del presidente del Gobierno que, si finalmente resulta procesada por malversación, será un tribunal del jurado el encargado de dictar un veredicto de inocencia o culpabilidad.

No en vano, la ley es clara al respecto, tal y como explicaba el portavoz del Foro Judicial Independiente (FJI), Fernando Portillo, en redes sociales, para desmontar el relato con el que el Ejecutivo trataba de desacreditar de nuevo al titular del Juzgado de Instrucción número 49 de Madrid y hacer pasar su resolución como una excentricidad. No es el magistrado quien «decide» llevar a Begoña Gómez frente a un jurado popular, «como si tuviese otra opción», sino que queda «obligado» por la Ley Orgánica vigente en la materia (artículo 2.h) «sí o sí» a hacerlo.

Una explicación en la que abunda la abogada penalista Guadalupe Sánchez: «Peinado no propone nada» extraño para la mujer de Sánchez porque es «lo que establece la ley del Jurado» en estos casos. Una norma que, tal y como ha recordado la letrada, «fue aprobada por el PSOE que rechazó añadir a la misma algunas enmiendas que proponían excluir delitos como la malversación, por su carácter técnico».

De hecho, el artículo 1 de la Ley Orgánica del Tribunal del Jurado (LOTJ) establece que delitos como la malversación o el tráfico de influencias sean juzgados mediante esta fórmula. Con una excepción que es la que ha dejado al hermano de Sánchez, David Azagra, fuera de dicha posibilidad y es que, a diferencia de su cuñada, el músico también está procesado por un delito de prevaricación que excluye (y arrastra consigo a dicha exclusión) a cualquier otro ilícito de los reservados al tribunal del jurado.

Además, el juez Juan Carlos Peinado ha citado a Begoña Gómez para una comparecencia prevista en el artículo 25 de la misma norma. Será el próximo sábado a partir de las 18.00 horas cuando la mujer de Sánchez, junto con su asesora Cristina Álvarez y el ex jefe directo de ésta, hoy delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, se vean cara a cara con el magistrado para que el resto de las acusaciones y la Fiscalía concreten los hechos objeto de la investigación y la calificación jurídica de la misma.

Si bien cabe apuntar que, tras dicha visita en sede judicial, el magistrado podrá acordar el sobreseimiento de las actuaciones o bien la continuidad de las mismas con nuevas o ya existentes, pero pendientes, diligencias de instrucción, también cabe recordar que, por el momento, Peinado sigue a la espera de quela Audiencia Provincial confirme la obligación de Gómez de entregar el total de todos los correos electrónicos salientes y entrantes de su cuenta institucional de Moncloa, durante el tiempo que está siendo fiscalizado por el juez.

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