La libre elección de lengua en Baleares «funciona»: duplica sus alumnos y se extiende a los institutos

El plan de libre elección de lengua impulsado por el Gobierno de Marga Prohens consolida su expansión en Baleares. Esta iniciativa, que permite a las familias decidir si ciertas asignaturas se imparten en catalán o en castellano, pasa de 2.300 alumnos en once centros en su primera edición el curso pasado a 5.864 estudiantes en 19 colegios e institutos en este curso 2025-2026.

Aunque sigue siendo voluntario y se enmarca dentro de la normativa vigente que garantiza al menos la mitad de las clases en catalán, su crecimiento refleja, según el Ejecutivo, una respuesta positiva de centros y familias ante una fórmula que busca reforzar la competencia en ambas lenguas oficiales.

En su primera edición, correspondiente al curso 2024-2025, el plan se implantó únicamente en educación primaria y contó con once centros concertados, principalmente de Mallorca e Ibiza, con alrededor de 2.300 alumnos. Este curso 2025-2026 la cifra ha aumentado a 19 centros tras la incorporación de varios colegios más y los primeros institutos que han solicitado participar, lo que ha permitido casi duplicar el número total de estudiantes implicados.

Lo ha detallado el consejero Antoni Vera este martes en el Parlamento balear, donde defendió que la consolidación de este programa «para reforzar las dos lenguas oficiales funciona» y recalcó que no es una iniciativa improvisada. «La calidad educativa no se improvisa», señaló, para insistir también en que el plan es «voluntario» y que se desarrolla «con serenidad y seguridad».

Vera subrayó el respeto a la normativa lingüística y afirmó que el crecimiento del plan demuestra que los centros y las familias están encontrando en esta fórmula una vía para organizar la enseñanza en las dos lenguas oficiales «pensando en lo mejor para los alumnos».

El popular contestó así a la exdiputada de Vox, Idoia Ribas, que celebró que «dentro del cúmulo de despropósitos» que a su parecer contiene el acuerdo de investidura «negociado por teléfono desde Madrid por gente que pasa olímpicamente de Baleares» al menos se haya podido poner en marcha el plan de libre elección de lengua.

No obstante, la diputada no adscrita en el Parlamento, considera que el PP tiene «pánico» a la posible movilización social que supondría cambiar la normativa lingüística de la ley balear de educación. «Ojalá pronto cualquier familia pueda llevar a sus hijos a un centro acorde a sus preferencias lingüísticas, pero para eso tendríamos que avanzar en el distrito único. Pero ya hablaremos de eso otro día», señaló Ribas.

Para sumarse al programa, los centros deben acreditar que disponen de los recursos necesarios, ajustar la organización de grupos y horarios y garantizar que existe un número suficiente de familias que solicitan cada opción lingüística. La Consejería prevé una evaluación externa del plan en el curso 2027-2028, que llevará a cabo el Instituto de Evaluación y Calidad del Sistema Educativo (Iaqse) con pruebas específicas para medir el grado de competencia alcanzado por los alumnos participantes.

La obligación del catalán en el 50%

El plan, que fue exigido por Vox a cambio de facilitar la investidura de Marga Prohens, nació con la intención de reforzar la competencia en ambas lenguas oficiales entre el alumnado y de ofrecer mayor autonomía organizativa a los centros. Su aplicación es voluntaria tanto para los colegios como para las familias y, aunque introduce una mayor presencia del castellano como lengua vehicular en determinadas materias, mantiene el marco legal vigente, incluido el decreto de mínimos que exige que al menos la mitad del horario lectivo se imparta en catalán.

En Primaria, la elección puede aplicarse a asignaturas como Matemáticas o Ciencias, mientras que en la ESO puede extenderse a materias como Matemáticas, Geografía e Historia y alguna disciplina científica, siempre en función de la demanda familiar.