Bilbao acoge a una delegación de la Generalitat para impulsar el catalán y el euskera en la UE

El gobierno socialista que dirige la Generalitat de Cataluña sigue con su política de contentar a Carles Puigdemont para ayudar a Pedro Sánchez, dado lo decisivo de los siete votos de Junts en el Congreso. El último pulso entre socialistas y juntaires es el traspaso de las competencias de inmigración, un tema particularmente complicado, a no ser que alguien quiera romper con la Constitución e ir en contra de la Unión Europea (UE), al darle a una autonomía las competencias estatales.

Otro de los mantras de Puigdemont es ver realizado su sueño de que el catalán sea lengua oficial de la UE. Es un tema también complicado, porque a parte de los idiomas oficiales, la UE tiene otros muchos, como el catalán que, oficiales o no, merecerían el mismo reconocimiento: en Francia, Italia o Alemania, por poner sólo unos pocos ejemplos.

Sin embargo, nos desfallecen en el intento. Por eso este pasado lunes el conseller de la Unión Europea y Acción Exterior de la Generalitat, Jaume Duch, se ha reunido en Bilbao con el secretario general de Acción Exterior y Euskadi Global, Alder Caballero. Recordemos que el expresidente de la Eurocámara Antonio Tajani dijo de Duch que era «catalán español sin miedo de reconocerlo y siempre ha estado leal a Cataluña y España».

El encuentro sirvió para reforzar, como han afirmado, la cooperación entre ambas comunidades autónomas, teniendo en cuenta la incertidumbre internacional. Cataluña y Euskadi deben trabajar juntas para defender la presencia de ambas en la toma de decisiones europeas. Es decir, como si fueran dos miembros más de la Unión Europea.

A la reunión también asistieron Agustí Fernández de Losada, secretario de Asuntos Europeos, Multilaterales y de Cooperación al Desarrollo de la Generalitat, y Mikel Anton, director de Asuntos Europeos del Gobierno Vasco.

Uno de los temas del encuentro fue avanzar para la oficialidad del catalán y el euskera en las instituciones de la Unión Europea, así como la seguridad industrial europea, la cooperación transfronteriza y la reconfiguración de las cadenas de suministro en un contexto de creciente proteccionismo.

Recordemos que el gobierno de la Generalidad de Cataluña tiene varios objetivos vinculados con la UE. El más destacado es aumentar su presencia e influir en las decisiones, sobre todo en el Consejo de la UE, la Comisión Europea y el Parlamento Europeo. El segundo es la oficialidad del catalán, por eso Duch ya se ha reunido con la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metsola, y la representante permanente de Polonia ante la UE, Agnieszka Bartol. Otros objetivos son el presupuesto plurianual de la UE 2028-2034, la descentralización de los fondos europeos y la política agraria.