
Joan Soteras, sentado junto al presidente del FC Barcelona, Joan Laporta
Investigación
Así funciona la red de favores que levantó Soteras para mantener su poder en la Federación Catalana de Fútbol
Sale a la luz más información sobre el caso de presunta corrupción ligado al presidente de la FCF
El 25 de abril de 2022, poco antes de las elecciones internas, la secretaría de la Federación Catalana de Fútbol (FCF) envió un correo en el cual se advertía que los órganos federativos, el personal de la Federación y los voluntarios se encontraban afectados por un deber de neutralidad, lo que comportaba la prohibición de realizar actos que indujeran o condicionaran el voto de los electores.
Al respecto también es clara la Orden ECD/2764/2015, de 18 de diciembre, por la que se regulan los procesos electorales en las federaciones deportivas españolas. En ella leemos que «las comisiones gestoras (...) no podrán realizar actos que directa o indirectamente, mediata o inmediatamente, induzcan o condicionen el sentido del voto de los electores, y deberán observar los principios de objetividad, transparencia del proceso electoral e igualdad entre los actores electorales». Y también que «estas previsiones serán aplicables a la actividad desarrollada por el personal de la federación y por los restantes órganos federativos durante el proceso electoral».
Sin embargo, una serie de personas vinculadas con la FCF han hecho caso omiso a esta orden y han presionado a los clubs o han influido en ellos para que votaran al actual presidente, Joan Soteras, investigado por presunta manipulación de las elecciones. Hablamos de los delegados territoriales que tienen un peso específico dentro del territorio y la confianza de los clubes.
En el fondo es un win-win: los clubes que tienen la confianza de este delegado consiguen cosas y el delegado obtiene un reconocimiento y unos favores dentro de la Federación. También es cierto que, para llevar a cabo esta campaña, el equipo directivo de Joan Soteras ayudó económicamente a estos delegados federativos.Dicho de otra manera, estos hicieron campaña por Soteras a cambio de dinero. Evidentemente, y teniendo en cuenta la orden citada anteriormente, esta actividad ilícita tiene o puede tener consecuencias penales. Sobre el particular hay jurisprudencia establecida por haber actuado irregularmente en campañas electorales. En concreto por lo que se refiere a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF).
La investigación de los Mossos
Por si esto fuera poco, las investigaciones llevadas a cabo por los Mossos d’Esquadra a través del teléfono móvil de Soteras, según ha podido saber El Debate, confirman que estaba al corriente de cada movimiento de los miembros de su junta directiva durante el proceso electoral de 2023.
Los informadores de Soteras eran José Miguel Calle, Álvaro Montoliu, Alejandro Guerrero «Bomba», Sergi Garrido, y Alberto Prieto. Eso sí, de los mensajes se desprende que Soteras estaba preocupado por su imagen pública y por no dejar rastro. Ambas están desde hace tiempo cuestionadas.
La propia mujer de Soteras, al ser conocedora de que montarían una estrategia para ganar las elecciones, le escribe: «Vigilad con el teléfono». Las elecciones tuvieron lugar el 13 de febrero de 2023. Aquel día Calle mandó un mensaje a Soteras que le decía: «Hola presi, info Top secret. A las 14h han votado 384, un 31 % y es día laborable, iremos a más de 1.000 votos y esta vez solo dos candidaturas. Objetivo llegar a 600. Ahora Soteras 217, Juanjo Isern 167».
La pregunta es ¿cómo podía saber Calle qué estaban votando los clubes si el voto es secreto? Y la respuesta está vinculada con lo que decíamos antes. Aquellos delegados federativos que, a cambio de dinero modificaron o hicieron que el voto de diferentes clubs cambiaran.
Ellos sabían perfectamente lo que cada uno firmaría. A ello debemos añadir todas las actas falsificadas. Todo esto ayuda a Calle a saber los resultados antes de que se abrieran las urnas. Y uno de estos delegados es Mohamed El Gadaoui, secretario de la delegación del Maresme. Este se dedicó a enviar mensajes de whatsapp a los presidentes de los clubs de esta zona, como estos:
«Al final, los coordinadores muchas veces tenéis influencia directa en vuestro club, tenéis mucho poder en el club, podéis tener la posibilidad de hacer a vuestro presidente ir por un lado o por el otro, os vendrán a buscar y solo os pido si alguno decide dar apoyo a las dos personas que van por ahí diciendo que Moha va a ir a puta calle, que me gustaría que lo habléis conmigo»
En definitiva, lo que les está diciendo es que deben apoyar la candidatura de Soteras, porque así él continuará en el cargo de secretario de la delegación del Maresme y que los coordinadores influyan en los presidentes den su apoyo a la candidatura del tal Moha, porque como él no los ha tratado nunca nadie.
Falsificación de firmas, conocimiento de cómo funcionaban las elecciones, miembros de la FCF rompiendo la neutralidad que les pide la ley, conseguir votos a cambio de dinero, mensajes rescatados por los Mossos d’Esquadra… toda una colección de acciones fraudulentas para revalidar una victoria que las urnas no les iban a dar.