El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig.
Comunidad Valenciana
Puig vuelve a callar ante Sánchez y su intención de cobrar peajes en las autovías
El presidente valenciano guarda ahora silencio, mientras en octubre aseguró que no era «el momento»
«En general, no es el momento para poner más tasas en la actividad económica». Esta frase pronunciada por el presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, el 20 de octubre en Elche (Alicante), ya se le volvió en contra al jefe del Consell cuando los partidos del Botánico sacaron adelante implantar una tasa turística en la Comunidad.
Puig dijo esa sentencia tras ser preguntado sobre la intención del Gobierno de Pedro Sánchez de cobrar peajes por el uso de las autovías de la red nacional. En ese momento, el rechazo de buena parte de la opinión pública y de barones socialistas, como Puig, obligaron al Ejecutivo a aparcar temporalmente la iniciativa.
Sin embargo, al igual que con la tasa turística, el presidente valenciano puede volver a ser víctima de sus propias aseveraciones. Y es que, ante las noticias que aseguran que Sánchez ha reactivado su plan para imponer peajes en todas las carreteras -para lo que ya habría encargado un servicio de asesoría y consultoría jurídica- el presidente valenciano sigue guardando silencio.
El portavoz adjunto del Partido Popular en el parlamento autonómico, Miguel Barrachina, critica la reactivación de la medida y lamenta la postura adoptada por Puig: «No le hemos oído decirle a su jefe Sánchez que no queremos más peajes». Para el Síndic, «ya es suficiente con el alto precio de la gasolina, como para incrementar aún más el coste de los usuarios», sobre todo de los transportistas, «que es su medio de vida».
Barrachina no solo ha censurado la actitud del jefe del Consell, sino también la de las formaciones del Botánico: «Los mismos alcaldes y cargos de izquierdas que hace cuatro años lucían pancartas contra el peaje de las autopistas ahora callan ante la posibilidad de su vuelta». En opinión del popular, esto supondrá que los valencianos «pagarán peajes y los socialistas, Compromís y Podemos ahora guardarán silencio».
En este sentido, el portavoz adjunto destaca la «perpetua contradicción de la izquierda valenciana», ya que quiere trasladar a la sociedad que este «nuevo impuesto a la circulación es enormemente progresista y una tasa a los ricos y no algo regresivo».
Perjudicial para la seguridad vial
Por otra parte, Barrachina ha calificado el cobro de peajes en la red de autovías como algo «discriminatorio y perjudicial para la seguridad vial» porque el tráfico «se desplazará las vías secundarias alternativas, con peor seguridad».
Asimismo, el portavoz adjunto le ha recordado a Puig que no es «el momento» de sacar adelante la medida, más aún cuando a los 94.000 transportistas de la Comunidad Valenciana «se les ha subido la prima del seguro obligatorio, el gasoil, el impuesto de matriculación». «Sería la puntilla, es insoportable», afirma.
Como una de las causas a la hora de cobrar peajes, Barrachina apunta a la ideología: «Persiguen el vehículo privado y arruinan el transporte público», por lo que esta nueva tasa supondría una «penalización triple».
Respuesta socialista
Por su parte, la portavoz de Infraestructuras y Transportes del PSPV-PSOE en las Cortes Valencianas, Sandra Martín, ha salido al paso de las declaraciones de Barrachina, las ha definido como «ocurrencia» y ha acusado al PP de «hacer creer» que se ha aprobado algún peaje”.
Siguiendo la línea expuesta por la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, la diputada valenciana ha asegurado que el Gobierno se está limitando a «estudiar los diferentes modelos de financiación» de las carreteras, en el marco «del anteproyecto de ley de Movilidad Sostenible».
Por último, Martín ha indicado que en sus filas son conscientes de que no es «el momento de poner en marcha nuevos peajes» y ha instado al PP a «leerse mejor la documentación y no inventarse una nueva mentira» para «desacreditar al Gobierno».
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