Imagen de archivo de Marta Barrachina, Carlos Mazón, Vicent Mompó y Toni Pérez
Encuestas electorales: el PP mantendrá las diputaciones de Valencia, Alicante y Castellón frente a una izquierda dividida y lastrada por la corrupción
Los sondeos apuntan a un nuevo mandato de los populares con el apoyo de Vox en unas corporaciones provinciales que manejan un presupuesto de más de 1.385 millones de euros al año
El centro derecha mantendría las diputaciones provinciales provinciales de Valencia, Alicante y Castellón si se celebraran ahora los comicios municipales, de acuerdo con las últimas encuestas electorales, frente a una izquierda que llega al ecuador de la legislatura dividida y enfrentada por el lastre que suponen los escándalos que cercan al entorno más próximo del presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez.
El popular Vicent Mompó preside la Diputación de Valencia junto al partido comarcal Ens Uneix y el apoyo externo de Vox. El Partido Popular también gobierna la Diputación de Castellón en la actualidad con Marta Barrachina como presidenta y con mayoría absoluta. En la Diputación de Alicante, el popular Toni Pérez, alcalde de Benidorm, preside la corporación provincial con el respaldo de Vox. En todos los casos, los sondeos de empresas demoscópicas como Sigma Dos o SyM Consulting apuntan a la posibilidad de que tras las elecciones municipales del 30 de mayo de 2027 el PP pueda revalidar las tres presidencias.
Conforme publicó El Debate el lunes 16 de junio, las encuestas electorales que manejan los partidos políticos coinciden en situar en cabeza de los sondeos al Partido Popular en Valencia, Alicante, Elche y Castellón de la Plana, las cuatro ciudades más pobladas de la Comunidad Valenciana. En todos los casos, los populares ganarían de nuevo las elecciones municipales y estarían en condiciones de revalidar sus mandatos con María José Catalá, Luis Barcala, Pablo Ruz y Begoña Carrasco al frente, pactando con Vox.
En el lado contrario, el PSPV-PSOE de Diana Morant transita por su particular vía crucis por los casos de corrupción que afectan al socialismo y, especialmente, por los audios interceptados por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil en los que José Luis Ábalos, número dos de la ministra de Ciencia en la candidatura a las últimas elecciones generales, se repartía las prostitutas con su entonces asesor Koldo García.
Al respecto, el PP de Carlos Mazón podría repetir en la Generalitat pactando con Vox, siempre de acuerdo con la media de los últimos sondeos.
En la ciudad de Valencia, una plaza clave para el resultado electoral, la apuesta de Sánchez por la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé, no surte efecto en las encuestas, hasta el punto de que los sondeos continúan situando al PSOE por debajo de Compromís y la suma entre ambos les condenaría a cuatro años más a la bancada de la oposición frente al PP de la alcaldesa, María José Catalá, y Vox, que lograrían alcanzar los diecisiete concejales que otorgan la mayoría absoluta en el Ayuntamiento de la capital autonómica.
Mientras los socialistas no remontan en las encuestas a medida que ha ido perdiendo fuelle el efecto de la histórica dana que arrasó parte de la provincial de Valencia, Compromís afronta una doble crisis que también empieza a reflejarse en los sondeos. Por un lado, trata de marcar distancia con los casos de corrupción que afectan a los socialistas, sus socios en los ayuntamientos en los que todavía gobiernan como Vila-real. Por otro, se plantea la ruptura con Sumar en el Congreso de los Diputados ante la negativa de la formación de Yolanda Díaz de citar a Pedro Sánchez a la comisión de investigación de la riada de Valencia en la Cámara Baja.
Además, en los próximos meses, Compromís afrontará el desgaste que supondrá el juicio contra la exvicepresidenta de la Generalitat Mónica Oltra por la gestión del caso de los abusos sexuales por parte de su entonces marido a una menor tutelada por el Gobierno autonómico, cuando la dirigente de izquierdas era la máxima responsable de la Conselleria del ramo.
En este contexto, el centro derecha estaría en disposición de revalidar sus mandatos en las diputaciones provinciales de Valencia, Alicante y Castellón, que este año manejan presupuestos de 785 millones de euros, 383 millones y 217 millones, respectivamente. En total, 1.385 millones de euros que gestionan unas administraciones claves para los municipios, especialmente los de menor población.