Asesores, cada vez más, comodines curalotodo

¿No debería despertar el interés y la curiosidad de analistas clínicos, sociólogos, periodistas, ikerjiméneces, antropólogos… el fenómeno que cada vez se da con más frecuencia, que no encontrándose solución para un envenenado conflicto, por considerarse imposible llegar a un acuerdo por culpa de las enconadas posturas discrepantes, una de las partes deja caer la palabra «asesoría» y, como por ensalmo, ese comodín logra que las actitudes hasta dese momento irreductibles cedan el paso al consenso, que de inmediato se plasma en un reparto de a cuántos salimos? Y unos más que otros, pero todos contentos con el cupo conseguido, a firmar lo que haga falta.

Paiporta se merece algo más

El de Paiporta es el caso más reciente y paradigmático. Eran dos asesores los que tenía su socialista gobierno municipal y han pasado a seis. Eso y aprobar las nuevas retribuciones para los concejales, han lubricado el acuerdo por el que Compromís, se avenga a coaligarse con los socialistas. Son muchos los vecinos de Paiporta que no entienden estos cambalaches, que van a suponer para las arcas municipales más de medio millón de euros en sueldos de concejales y 260.000 para asesores. Y más cuando son tantas las obras destruidas por la dana que, correspondiendo hacerlas al ayuntamiento, siguen esperando. Gracias a los nuevos asesores, en nada se verá en calles, plazas, parques, escuelas…que todavía no han sido rehabilitadas, cómo ellos hacen posible que Paiporta renazca.

Ninet y su papel en el MUViM

¿Es necesario que el Museo Valenciano de la Ilustración y la Modernidad (MUViM), espacio cultural de la Diputación de Valencia, además un director, que lo tiene: Rafa Company Tello, necesite también de un subdirector/a, que en este caso es Carmen Ninet? Desconozco hasta qué punto es preciso, y más si cuenta con un equipo tan amplio de jefes como el que sigue: Exposiciones, Amador Griñó. Investigación y gestión cultural, Marc Borràs. Protocolo y actividades didácticas, Amparo Sampedro. Gestión administrativa, Isabel M. Ferrandis. Biblioteca, Sergio Vilata. Coordinación de exposiciones, Mª José Navarro. Negociado ad. de exposiciones, Pilar Albiach. Comunicación, webs y redes sociales, Alejandro Piera. Producción, Ada Borràs. Atención al público en salas y consigna: Mercedes Aguilar y Elena Rosa Peña.La saga de los Ninet

La saga de los Ninet

Carmen Ninet Peña (Valencia, 1958) está a la espera de que los servicios jurídicos de la Diputación de Valencia diluciden si cuenta con titulación académica suficiente para su actual cargo de subdirectora del MUViM. En el ínterin, se recuerdan y airean por parte de interesados, curiosos, adversarios políticos (los de otros partidos) y enemigos (los de su propio partido), los orígenes de la carrera político-funcionarial de la señora Ninet, que entró como subalterna (alguacil) y como buena progresista ha progresado adecuadamente tanto en el PSPV-PSOE como en la Diputación de Valencia en la que su padre, Santiago Ninet, factótum-mano izquierda del presidente Antoni Asunción, pudo desarrollar desde los años ochenta, un activo papel colocando a varios familiares directos en la corporación, hospital provincial…siguiendo el modelo laico del padre Peyton: «Familia que contrata unida….» Carmen Ninet, casada con José María Ángel Batalla, forma parte de la élite funcionarial de la Diputación y cobra algo más de cien mil euros/año. Más que su presidente.

Todos pierden en la guerra curricular

¿Habrá rendición, armisticio, sacarán bandera blanca….? Manda huevos que en un país, presidido por quien pactó con quienes dijo que nunca jamás pactaría, uno de sus ministros -que tampoco tiene un historial muy aseado que digamos – sea el que tremole la bandera de los currículos académicos dirigiendo la andanada contra una joven adversaria, a la que cree haber pillado en pecado de lesa titulación. La acosada joven no resistió el embate, trufado como estaba de tantas insidias, y al final hizo lo que debía, por antes haber hecho lo que no debía. Parece que con los calores el ministro inquisidor ha cesado en su furor, no porque esté arreglando trenes que se paran. ¿Nadie entre tanto asesor como tiene en nómina le hizo ver lo peligroso que podría ser una iniciar una guerra de currículos si su propio jefe tiene un lamparón cum fraude por un doctorado conseguido gracias a un cerebro de alquiler?

OPS es Andrés Rábago y…

El Roto y OPS son seudónimos utilizados por el escritor, pintor e historietista Andrés Rábago García, (Madrid, 1947), ácido y agudo humorista cuya producción –desde Hermano Lobo a El País- no tiene nada que ver con los ásperos monólogos de quien está detrás de unas iniciales como las suyas, Y que son, nada menos ni más, que las de Óscar Puente Santiago, ministro y portacoz de Sánchez, que de tanto meter el dedo en ojo ajeno ha visto cómo donde las dan las toman, que en lengua valenciana viene a ser «fer com fan no es pecat». Y el que ha terminado pagando el pato ha sido José María Ángel Batalla, ya dimitido. La mujer de éste a la espera. Y Pilar Bernabé, que tendrá que salir a calentar en cualquier momento para terminar sus carreras.

Todo el mundo exagera sus currículums

Relajémonos. El humorista Comandante Lara, seudónimo de Luis Lara (Jerez de la Frontera, 1976) cuenta un chiste sobre el controvertido asunto de los currículos académicos, del que llevamos semanas hablando como si de un concurso de tiro y arrastre se tratara. Pone en boca de un personaje que ha sido pillado en fraude y trata de defenderse: «¿Qué pasa, todo el mundo exagera cuando presenta su currículum? Sí, pero usted ha dicho que es Batman. ¿De verdad que es usted Batman?» Al final el Batman acabará siendo el propio Óscar Puente por su máster en dirección política, otorgado por la Fundación Jaime Vera, de la que ya hace siete años habló la que entonces era secretaria de igualdad del PSOE, Carmen Calvo, para aclarar que esa fundación «no daba títulos». Y que lo de máster sólo es «jerga que utilizan los partidos».

José María Ángel, segunda parte

Ya puesta en el correo mi colaboración semanal en El Debate, me golpea y sorprende la noticia del intento de suicidio de José María Ángel Batalla. Que haya podido superar su incidente con la prontitud con que fue auxiliado por fuerzas de seguridad y equipo médico del hospital de Llíria, es una buena noticia. A mis deseos de que su recuperación sea total y completa, debo unir mi consternación al comprobar que haya dirigentes políticos que no dejan pasar la ocasión de tratar de obtener un miserable rédito político. Las sufridas por Rita Barberá a Carlos Mazón, si fueron y son insidiosas campañas de acoso, sin parangón posible con ninguna otra. Si las manifestaciones de Diana Morant, culpando a periodistas y adversarios políticos de los problemas de JM Ángel Batalla, han sido hechas por iniciativa de una asesoría de prensa, más le conviene que le dé el finiquito. Y si han sido motu propio, ya que ella no lo hará, que lo hagan sus compañeros y es muy probable que deduzcan que si le viene grande, muy grande, la secretaria general del PSPV-PSOE, mantenerla como candidata a la presidencia del Consell, será porque ya se han convencido de lo muy difícil que tienen hacer que reverdezca el follaje del Botánico.