Angelita Romero de Torres
Angelita Romero de Torres: el alma del jardín familiar
El patio se puede visitar hasta el 14 de mayo
Angelita era la menor de los ocho hermanos Romero de Torres. La hermana pequeña de Julio y de Enrique era conocida por este diminutivo que un día traspasó las fronteras familiares y le acompañó, ya nonagenaria, hasta su muerte. Pero ella era mucho más que la hermana del famoso pintor, algo en lo que tuvo que ver tanto la sangre que corría por sus venas, como la casa, singular como pocas, en que nació, vivió y falleció.
Ella se encargó de que el jardín de su casa tuviera un alma especial, con una combinación de especies florales, casi todas olorosas y muchas de ellas ya desaparecidas de los patios, mezcladas con los restos arqueológicos que la familia adquiría y que servían para decoración del espacio. Este jardín se abre al público cada año en el mes de mayo y en esta ocasión se puede visitar hasta el día 14.
La obra de Angelita
Aunque su remozado aspecto actual dista bastante del espíritu que le imprimió Angelita el visitante puede hacerse una idea de lo que supuso este lugar para la vida cultural de Córdoba cuando la familia Romero de Torres se encontraba en plena ebullición creativa. Se conservan antiguas grabaciones en las que se ve a su hermano Julio pintando en este jardín.
Angelita Romero de Torres, en la fuente del patio
Como homenaje a la figura y a la personalidad de Angelita Romero de Torres 81881-1975) el Museo de Bellas Artes se ha sumado con una exposición en la Sala V en la que bajo el título 'El poema de su jardín' se recuerda la personalidad de esta mujer cuya sensibilidad le llevó a la defensa del patrimonio histórico artístico de Córdoba y que fue recompensada con su ingreso en la Real Academia de Córdoba en 1945 y con la concesión del Premio Zahira.
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