Solemnidad de Cristo Rey
Carta pastoral
Venga a nosotros tu reino
El obispo de Córdoba escribe esta semana sobre la Solemnidad de Cristo Rey, que se celebra este domingo, último del año litúrgico
Este domingo es el último del año litúrgico antes del Adviento y se conmemora la solemnidad de Jesucristo Rey del universo, «como colofón del misterio cristiano, resumen de todo el misterio de Cristo.»
Así comienza la carta pastoral de esta semana el obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, titulada Jesucristo, Rey del universo «…a mí me lo hicisteis» en la que el prelado explica la dimensión celestial de ese reinado y cómo Cristo propone a los hombres participar de ese reino no sólo instaurándose en el corazón de cada persona, «sino que quiere ser un reinado social, donde por la colaboración de los cristianos vayan cambiando las coordenadas de la convivencia social entre los humanos. Venga a nosotros tu reino».
Demetrio Fernández, obispo de Córdoba
Escribe monseñor que «aparece en la liturgia de este domingo la figura de Cristo buen pastor, que da la vida por sus ovejas, y que hace experimentar en sus ovejas el amor, el cariño de su pastor por cada una de ellas», una imagen con la que los cristianos pronto comenzarían a representar al Señor, portando sobre sus hombros a la oveja perdida.
Pero también en esta fiesta, recuerda el obispo de Córdoba, Jesús aparece como juez misericordioso en el juicio final, un reino en que se es admitido en función del amor que se dé a los más necesitados, a los pobres, a los desamparados. «Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la creación del mundo».
Pobres que sienten la cercanía de Cristo «gracias a la generosidad de sus discípulos». «Jesús se identifica con cada uno de esos pobres y en cada una de sus necesidades, como momento de encuentro y de salvación. Y nos invita a sus discípulos a recorrer ese camino de atención a los necesitados, donde nos encontraremos con Jesucristo en persona», escribe monseñor.
Es por tanto esta una fiesta que no solo se circunscribe a un día del año litúrgico- el último- porque «durante todo el año, él nos señala el camino», recuerda el prelado, y concluye advirtiendo que «cada gesto de amor que hacemos a nuestro prójimo, a él se lo hacemos y no quedará sin recompensa».
Pueden leer la carta pastoral íntegra en este enlace.
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