Imagen de El Rescatado de la hermandad y cofradñia de Jesús Nazareno Rescatado y María Santísima de la Amargura
El Rescatado le da la bienvenida a marzo con un primer viernes y un sabor a lo clásico
La hermandad celebra su habitual besapiés cinco años después
Quizá la valoración sea distinta para todas las personas. Pero cada cofrade conoce bien lo que significa la espera hacia un nuevo año y un nuevo día grande en el seno de su cofradía. En la del Rescatado, además de cada Domingo de Ramos, hay un día marcado en morado en el calendario. El primer viernes de marzo. Este año, además, coincide con el primer día del mes. Y la pandemia y la posterior desconfianza, robó lo que era un acto natural, algo que supera la barrera de la hermandad trinitaria y llega a la ciudad cofrade al completo.
Cada primer viernes de marzo, el Rescatado recibe a sus más fieles seguidores, quienes realizan un devoto besapiés tras realizarle una petición en forma de oración. Sin embargo, la pandemia por el coronavirus privó de algo tan único y cercano como un beso a los pies del señor. Una acción reverencial fue lo más cercano que estuvo el primer viernes de marzo de los últimos cinco años. Y si un año de espera es largo, aún más lo son cinco.
La hermandad preparó un altar de cultos a la altura. Este viernes, a las 21.00 será la función principal. La eucaristía estará presidida por el reverendo Fray Manuel García y acompañada por la capilla musical de la hermandad de la Misericordia. El Rescatado estará expuesto desde las ocho de la mañana.
Durante este viernes, los actos devotos se extienden a más hermandades. La hermandad del Remedio de Ánimas, el Prendimiento, el Calvario (En la Catedral) o La Salud de Puerta Nueva, celebran también actos de veneración y besapiés de sus titulares.
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