Fundado en 1910

03 de mayo de 2024

Potaje de garbanzos con espinacas con crema de cebolla confitada, pan payés y huevo cocido, La Posada de Pradorey

Potaje de garbanzos con espinacas con crema de cebolla confitada, pan payés y huevo cocidoLa Posada de Pradorey

Gastronomía

Los mejores restaurantes para disfrutar de los Viernes de Vigilia con potaje, bacalao y torrijas

Las opciones más allá de la carne son numerosas e igual de apetitosas

La Cuaresma es el periodo comprendido entre el Miércoles de Ceniza y el Jueves Santo. Para los católicos tiene un significado especial, ya que se trata de una fase de purificación, además de la conmemoración del tiempo que Jesús permaneció en el desierto de Judea, en Jerusalén.
En palabras del Papa Francisco, esta representa un «tiempo favorable para volver a lo esencial, para despojarnos de lo que nos pesa, y para reconciliarnos con Dios». También es una etapa en la que la Iglesia invita a sus fieles a purificarse para reconciliarse con su fe y con ellos mismos. Su práctica data del siglo IV, cuando se da la tendencia para constituirla en tiempo de penitencia y de renovación para toda la Iglesia.
En este sentido, se practica el ayuno y la abstinencia de ingerir carne durante los días de vigilia, pero las opciones restantes son numerosas e igual de apetitosas.

El jardín de Arturo Soria

Carabinero a la brasa

Carabinero a la brasaInstagram

Desde su apertura en mayo de 2020, de la mano de Jesús González Espartero, se ha convertido en uno de los vergeles más famosos de la capital gracias a un entorno mágico con un gran jardín que acoge la preciosa terraza y el salón acristalado. La máxima de 'producto, calidad y tradición' en la que basan su cocina se traduce en recetas perfectas para los Viernes de Vigilia como el Carabinero a la brasa sobre huevos y patatas panadera, el Rape del Cantábrico a la brasa con pilpil, el Arroz meloso con mejillones y chipirones, la recién llegada Merluza en salsa marinera al estilo Guetaria o los inamovibles Bocados de atún salvaje sobre limas que siempre apetecen para abrir boca. El postre en estas fechas está más claro que nunca… Torrija brioche con crema de naranja y helado
Calle Arturo Soria, 207

La Taberna de Elia

Pintxo de bacalao

Pintxo de bacalao

Es más que sabido que La Taberna de Elia, con Cata Lupu al frente, es un templo carnívoro, pero sin duda es mucho más que eso, y quizás la Cuaresma es un buen momento para descubrir el 'mar' de este asador, porque los mariscos y pescados que pasan por sus brasas conquistan a todos. Entre los entrantes resulta glorioso su Pintxo de bacalao en tempura que será el complemento perfecto al suculento Potaje de Vigilia que se cuela entre los fuera de carta de los viernes. En el apartado dulce: torrija, y la suya está deliciosa. La hacen caramelizada y la sirven sobre chocolate blanco infusionado con especias y helado de manzana asada.

​Vía de las Dos Castillas, 23. Pozuelo de Alarcón

Luz de lumbre

Torrija, chocolate, helado

Torrija, chocolate, helado

Luz de Lumbre es el segundo proyecto de Cata Lupu, un versátil local para el día a día de los del pueblo, y a la vez templo del producto para todos, en el que no faltan clásicos de este apasionado de su profesión que se complementan con una riquísima selección de pizzas y hamburguesas –incluso hay una deliciosa de salmón–.

Por supuesto, los Viernes de Vigilia no falta el Potaje, 100 % tradicional. Comamos de 'cuchara, cuchillo y tenedor' o de manera más informal, es imposible irse sin disfrutar de uno de sus caseros postres. Gran parte de su carta está disponible para llevar, y sin duda es un sabroso broche tras un paseo por la Sierra o una visita al Monasterio de San Lorenzo de El Escorial.

​Calle de los Estudiantes, 6. San Lorenzo de El Escorial.
Comentarios
tracking