Un niño hablando con sus padres
Más hablar y menos móvil en Semana Santa: consejos para potenciar la comunicación en la familia
El Debate consulta con un experto sobre cuáles son las mejores recomendaciones para evitar el abuso de las pantallas con los hijos, en la pareja, con nuestros mayores y en la vida social en general
Estas vacaciones de Semana Santa en familia y con amigos, son un buen momento para poner en práctica diferentes actividades que potencien la comunicación personal y eviten el fracaso de una comunicación demasiado centrada en la utilización del móvil y las pantallas que originan el distanciamiento entre las personas y potencian la incomunicación. Es necesario que desde la familia se pongan en marcha mecanismos que eviten que los más jóvenes solo se comuniquen por chats y en redes sociales.
Por ello, el experto en habilidades de comunicación social, familiar y estrategias del lenguaje oral de la Fundación Casaverde, Julio García Gómez, recomienda una serie de pautas y consejos prácticos para evitar el abuso de las pantallas en estos días de descanso en familia y potenciar la comunicación con los hijos, en la pareja, con nuestros mayores y en la vida social en general. Desde el ámbito familiar hay que establecer unas reglas de funcionamiento que pongan de acuerdo a padres, hijos y personas mayores, los abuelos de la casa, con ejercicios y pautas que podemos desarrollar con las siguientes claves:
Zonas prohibidas para móviles
Limitaremos el uso del teléfono móvil en determinadas zonas comunes de la vivienda en el horario en que casi todos coincidan en casa, a mediodía y por la noche, normalmente. Se depositarán los móviles a la entrada de la estancia en un lugar común para no disturbar las conversaciones y el diálogo de los miembros de la familia. Solo se admitirá utilizar el teléfono si suena insistentemente y se atenderá la llamada de manera verbal, sin escribir en servicios de mensajería y chat, que dan lugar a un hilo constante de pregunta/respuesta que entorpece la reunión familiar o social.
Debate en familia a favor o en contra de un tema de conversación
Para fomentar el diálogo presencial con el uso de la palabra, es necesario fijar unos pocos minutos, no más de 30, al finalizar la jornada, donde de manera entretenida podamos abrir un debate entre los familiares o los componentes de un grupo de amigos, en que cada persona opine durante pocos minutos sobre un tema de conversación y los demás puedan exponer sus opiniones a favor o en contra.
Actividades para los niños de la casa
A modo de sencillos juegos para los más pequeños de la casa, podemos poner en práctica una serie de ejercicios de aprendizaje:
- Empezar a contar un cuento popular de final a principio, en lugar de principio a final para fomentar la imaginación.
- Cambiar los roles de los personajes de ese cuento popular que todos conocen donde el lobo es el bueno y la abuelita no lo es tanto.
- Encadenar la sílaba del final de una palabra con el principio de otra.
- El juego de la radio en que la niña o el niño entrevistan al papá y viceversa. Graban en el móvil y escuchan a continuación.
- Televisión en directo: el niño graba una escena con el móvil de papá o mamá y luego comenta lo que ha grabado como un presentador de la televisión.
Las personas mayores, en el centro de atención
Con los abuelos podemos poner en marcha juegos divertidos donde ellos nos cuentan recuerdos de su infancia: a qué jugaban, con qué se divertían, qué libros leían, que películas veían. Las fotografías también nos pueden ayudar mucho para dialogar y divertirnos. Podemos pedir a los mayores que nos dejen sus fotos y que nos cuenten qué recuerdan de ese momento que captó el fotógrafo: una reunión, la boda, el bautizo de los pequeños.
Romper la timidez al hablar y practicar el lenguaje gestual
Es especialmente recomendable practicar, además del lenguaje verbal, el gestual de mirada, movimiento de cabeza, torso, pies y manos. Con el uso de las nuevas tecnologías no solo se pierde la práctica de la voz, sino que además en general los más jóvenes no saben como pueden potenciar el diálogo con los gestos. Es muy interesante que podamos realizar juegos en familia y amigos donde sin palabras escenifiquemos, por ejemplo, una acción cotidiana como comer, cepillarse los dientes o levantarse de la cama. Esto nos ayudará a escenificar y perder la timidez ante los demás y potenciará el uso estratégico del lenguaje del cuerpo.
Disfrutar de la comunicación
Si combinamos adecuadamente ocio y aprendizaje podremos disfrutar de unas vacaciones diferentes que sirvan para potenciar la relación de pareja, la relación familiar y social. La comunicación está en todo lo que hacemos y compartimos. Más allá del uso y abuso de las pantallas, está saber hablar, dialogar, compartir, negociar, disfrutar con las mejoras habilidades de comunicación que podamos desarrollar. Las destrezas y competencias en comunicación nos ayudarán a mantener una mejor relación social en el ámbito profesional y a saber vendernos con una marca o sello personal que nos diferencie del resto con nuestra peculiar forma de exponer un tema o desarrollar una reunión del tipo que sea: familiar, social o profesional.
Voz, imagen y lenguaje gestual
Es imprescindible que podamos manejar estratégicamente la comunicación interpersonal en los tres pilares básicos de la comunicación: uso de la voz, proyección de la imagen y el apoyo en el lenguaje no verbal, gestual. Si somos capaces de desenvolvernos con soltura con estos tres elementos, a través de la práctica, podremos crear el mejor ambiente familiar en estos días de Semana Santa y realizar con éxito nuestras presentaciones académicas o profesionales del futuro. En definitiva, nuestro desarrollo personal y profesional se verá afianzado si trabajamos adecuadamente nuestras competencias verbales y sabemos gestionar adecuadamente nuestras emociones para la comunicación de estados afectivos, sabiendo como podemos trasladar nuestras ideas de la mente a la expresión oral con habilidad y destreza para la consecución de resultados.
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