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Palomitas de maíz

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Ocho películas para ver en familia con tus hijos adolescentes

La llegada de la adolescencia suele suponer una natural –y positiva– separación entre padres e hijos. Sin embargo, para evitar que esa distancia se convierta en un abismo, es necesario cuidar y propiciar los momentos en familia. Y pocos planes pueden resultar tan atractivos y eficaces para unir y reforzar los vínculos que un plan de cine en casa, con su mantita y su pizza disponible.

Estos ocho títulos – en los que hay aventura, música, deporte y crecimiento personal–, inspirados en las recomendaciones de la publicación especializada Guiainfantil.com, no sólo garantizan pasar un buen rato, sino que pueden dar pie a conversaciones más profundas sobre el esfuerzo, el perdón, la verdadera amistad o la importancia de ser uno mismo frente a la presión del grupo.

Además, todos estos títulos pueden verse en las diferentes plataformas disponibles en España, como Netflix, Movistar+, Apple TV y Amazon Prime.

1. Billy Elliot (2000)

Un niño de pueblo minero descubre que su corazón late al ritmo del ballet y lucha por su sueño frente a prejuicios, conflictos sociales y miedos familiares. Preciosa para hablar de vocación, constancia, personalidad y apoyo de los padres.

2. El niño que domó el viento (2019)

Basada en la historia real de William Kamkwamba, un niño que con 13 años construye una turbina eólica para salvar del hambre a su aldea en Malaui. Ciencia, ingenio y esperanza que inspiran a estudiar… y a servir.

3. Elegidos para el triunfo (1993)

La disparatada y entrañable odisea del primer equipo jamaicano de bobsleigh (una especie de carrera por parejas en bólidos que se deslizan sobre pistas de hielo) rumbo a los Juegos de Invierno. Humor blanco que ensalza el trabajo en equipo, el realismo y la perseverancia contra todo pronóstico.

4. Kubo y las dos cuerdas mágicas (2016)

Una animación artesanal de Laika, un niño músico que busca la armadura de su padre para enfrentarse a un abuelo temible. La aventura se convierte en un viaje para custodiar la identidad, la memoria y el valor, envuelta en una fábula deslumbrante que emociona a toda la familia.

5. Ponte en mi lugar (2003)

El clásico escenario en el que un golpe fortuito permite a una madre y su hija adolescente intercambiar cuerpos. Una aventura que les permite descubrir, a golpes de humor, lo difícil que es estar «al otro lado». Ideal para trabajar la empatía, la necesidad de poner límites y la reconciliación dentro de la propia familia. Spoiler: también a los padres les hará mucho bien recordar su adolescencia.

6. The Karate Kid (2010)

Una versión revisada del clásico de los 80, con Jackie Chan recordando al célebre señor Miyagui. Dre se muda a China y, de la mano del señor Han (Jackie Chan), aprende kung-fu… y disciplina, respeto y autocontrol. Un remake que engancha a los jóvenes con valores claros, y a los padres más allá de la nostalgia.

7. Un sueño para ella (2003)

Daphne viaja a Londres para conocer al padre al que nunca vio. Comedia «feel-good» sobre identidad, familia y pertenencia, con un final que dará pie a charlar de mucho mayor calado sobre la verdad, la importancia de los vínculos y el tesoro que supone tener una familia.

8. Mi hermano persigue dinosaurios (2019)

Una preciosa película italiana con coproducción española: la llegada de Gio, con síndrome de Down, transforma a una familia y obliga al hermano mayor a aprender a mirar de un modo nuevo. Emotiva, luminosa y profundamente humana. Además de en Disney+ puede verse desde la web de BoscoFilms.

Tips para exprimirla al máximo

Pasar tiempo junto a un adolescente y dar pie a una conversación de impacto no es una ocasión que se presente todos los días. Así que, para exprimir el plan al máximo, te invitamos a que antes de ver la película os propongáis ir apuntando las frases que más os gusten, para comentarlas en cinco o diez minutos al terminar. Podéis ampliar la conversación con un «¿Qué habrías hecho tú cuando...?». Y cerrad cada breve intervención con un «me quedo con...». Porque lo importante no es sólo ver cine: es verlo en familia y dejar que eduque el corazón de padres e hijos.

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