Enrique Ponce alquila su finca para la celebración de bodas
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El nuevo negocio de Enrique Ponce para resolver sus presuntos problemas económicos
El maestro alquila su bien más preciado por 5.000 euros al día para celebrar bodas y eventos
El retiro mediático de Enrique Ponce se ha visto interrumpido tras salir a la luz el nuevo negocio que ha emprendido el diestro meses después de alejarse de los ruedos. Y es que tal y como anunció el programa Viva la vida el pasado sábado, el de Chiva se habría decidido a alquilar su finca Cetrina para la celebración de bodas en un intento de paliar la crisis económica que parece estar atravesando. Aunque no abrirá las puertas de la totalidad del inmueble, sí lo hará de una pequeña parte, la suficiente como para poder celebrar este tipo de eventos.
Todo apunta a que el maestro está decidido, aunque hayan sido sus supuestos problemas económicos los que le hayan impulsado a tomar esta firme decisión que tanto ha llamado la atención por el hecho de tratarse de uno de sus bienes más preciados, un terreno que alberga más de 900 hectáreas.
La información anunciada por el mencionado programa de televisión se sustenta en un anuncio oficial al que han tenido acceso y con el que han podido comprobar que la celebración de una boda en la famosa finca supone un desembolso de 5.000 euros al día. «Si siempre soñasteis con una boda en plena naturaleza, Cetrina es la ubicación perfecta para llevarla a cabo. Sus instalaciones repletas de encanto, así como el apoyo y asesoramiento de un equipo experto en eventos, conseguirán hacer de vuestro enlace un evento de éxito. Además de una fastuosa mansión de estilo andaluz con reminiscencias que recuerdan a la Maestranza de Sevilla, cuentan con amplias zonas ajardinadas, así como alojamiento para nuestros clientes que lo deseen», recoge el anuncio.
Del mismo modo, el espacio televisivo se puso en contacto con la empresa encargada de alquilar Cetrina con el objetivo de confirmar la información. Y del dicho, al hecho. No solo la confirmaron, sino que, además desvelaron parte de los detalles de la exclusiva finca ubicada en el municipio jienense de Navas de San Juan: «Correcto, nosotros llevamos la gestión de Cetrina. Tenemos amplias zonas verdes, con zonas ajardinadas y piscina. La finca es espectacular. Tenemos un salón por si tuviésemos mal tiempo, un salón cerrado. Dentro del precio del alquiler incluimos un loft para que pasen los novios la noche. Además, tenemos cuatro habitaciones dobles para los invitados. El precio de la finca, con todo incluido, son 5.000 euros», señalaron.
No obstante, parece que el deseo del maestro de explotar su propiedad le ha obligado a tener que ponerse de acuerdo con sus socios, ya que, según el programa vespertino de los fines de semana de Telecinco, la titularidad de la finca está repartida en tres porcentajes diferentes. El 42,5 % recae en manos del torero, el 55,5 % pertenece a Cetrina S.L y el dos por ciento restante es ocupado por «inversores privados».
Y es que esta nueva realidad se ha adentrado en la vida de Ponce en un momento clave de su vida personal. El diestro reside en Almería junto a su novia, Ana Soria, joven con la que inició un polémico noviazgo poco después de confirmar su separación de Paloma Cuevas.
Desde entonces, los rumores de crisis e inestabilidad no han dejado de acompañarlos, ni siquiera cuando la pareja tomó la determinación de alejarse de la vida pública y de desaparecer de las redes sociales. Ahora su nombre regresa al foco de la actualidad mediática, pero ambos siguen luchando contra todo tipo de habladurías y demostrando que su amor sigue siendo tan puro y verdadero como el primer día. Al parecer, no se trata de un romance pasajero, sino de una relación que ha ido tomando decisiones importantes conforme ha ido pasando el tiempo.
Hace escasas semanas, las informaciones que apuntaban a una crisis en su noviazgo, a que las discusiones eran insostenibles y a que el maestro anhelaba su vida anterior, aquella que compartía junto a su ya exmujer y madre de sus hijas, volvieron a copar los grandes titulares, pero tanto Ponce como Soria se aplicaron eso de «no hay mejor desprecio que no hacer aprecio». Optaron por seguir al margen de estos rumores evitando pronunciarse al respecto, pero según recogen varios medios de comunicación, se trató de una información que les hizo sentirse dolidos.
Desde entonces poco se ha sabido del maestro que, al contrario que su chica, ha conseguido que los medios perdiesen su pista. En cambio, sí que han trascendido los últimos planes de Ana Soria. Ha sido Semana la revista que ha publicado los detalles de una de las últimas salidas de la joven. El pasado fin de semana se reencontró con cuatro amigas con las que salió a comer a un exclusivo restaurante de Almería. Ana acudió con su mascota Ney, pero sin Ponce.
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