La Reina Sofía, en una imagen de archivo
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El regalo a la Familia Real que marca el inicio de sus vacaciones en Mallorca
La reina Sofía es una mallorquina de adopción y en agradecimiento se la recibe con flores.
Hay dos indicadores en la ciudad de Palma para saber que los Reyes han llegado a la isla. Uno, el aumento de agentes de seguridad, tanto municipal, nacional o Guardia Civil y otro, la llegada de un centro de flores al palacio de Marivent.
Nada más poner un pie la Reina Sofía, en la pista de aterrizaje del aeropuerto de Son Sant Joan de Palma, una de sus mejores amigas mallorquina llama a la floristería habitual de la Reina y le encarga su centro de flores favorito. «Nosotros sabemos que la Reina ha llegado antes de que se entere nadie. Nunca falla. Doña Sofia tiene una amiga mallorquina que no falla, según pone el pie en la isla, nos encarga que le llevemos un centro como bienvenida» nos cuentan en la floristería ubicada desde 1960 en el centro de Palma.
Doña Sofía suele llegar sobre el 20, 21 o 22 de julio, a la isla. Así han sido los últimos años aunque también es verdad que nunca habíamos tenido elecciones generales en vacaciones de verano y todo puede influir. Ayer miércoles 19 por la tarde, la floristería aún no habían recibido el encargo.
Los detalles de los amigos de la Reina
En la primera semana de vacaciones, la madre del Rey Felipe recibe esos cariñosos detalles de bienvenida de sus amigos. Todos los días, desde el centro de la ciudad, le envían uno o dos centros florales y esto es una costumbre que se repite año tras año, en Semana Santa y en verano.
Para la Semana Mayor, suelen enviarle centros con hortensias o peonías y en verano, flores pequeñas, sencillas que den sensación de silvestres y siempre en tonos pastel, rositas, blancos, malvas. Esa combinación cromática es su favorita. La Reina Sofía huye de los colores fuertes, así nunca se les ocurre, a los amigos que la conocen bien, enviarle ramos de claveles rojos, margaritas, rosas o girasoles.
Esas flores, la floristería mallorquina que mejor conoce sus gustos, nunca le envía a Marivent. Por el contrario las composiciones de fressias, astromelias, ranunculus y lisianthus, le fascinan. Y siempre ya arregladas y pinchadas en una esponja húmeda. Sin complicaciones que sea llegar y colocarlas encima de una mesa o en el aparador.
«Siempre en tonos pastel, en esa gama cromática de los rosa palo, blancos o lilas. Nunca nos piden plantas, tipo orquídeas, siempre composiciones florales en un centro. Son arreglos sencillos, pero muy elegantes. Nunca le hemos llevado ramos de flores grandes, ni de colores fuertes».
Hubo un tiempo en el que era tal la actividad social que se desarrollaba en Marivent, cuando recibían a grandes fortunas, reyes o empresarios influyentes, que el trajín de flores era enorme y durante muchas semanas «antes pasaban mucho tiempo en Palma. Ahora apenas unas semanas». Incluso traían las flores de fuera de la isla y una persona, encargada de la intendencia y de la decoración, las colocaba.
En Mallorca, igual que ocurre en Madrid, está el palacio oficial, que es el de la Almudaina, y el privado, que es Marivent. Los amigos envían sus flores de bienvenida a la Reina Sofía a Marivent «antes nuestro chófer los subía hasta la entrada de la casa, ahora los deja en la puerta a pie de calle, con el riesgo de que no sepan trasladarlo bien. Hay veces que nos preocupa cómo recogen los centros porque algunos son voluminosos».
No hace mucho tiempo, era costumbre celebrar una cena de gala en el palacio de la Almudaina, así como diferentes recepciones que también requerían de arreglos florales, para ello había un florista en el palacio. «Antes, como venían mucho necesitaban más flores». Los Reyes Felipe y Letizia van cambiando las costumbres de Palacio, pero hay algo que no varía y es que a la Reina Sofía no le faltan sus centros de bienvenida en cuanto llega a Mallorca.
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