MIRANDA RIJNSBURGER
Miranda, la mujer de Julio Iglesias, llega a Marbella: maletas, mascotas y nueva nuera
Miranda Rijnsburger aterriza en Marbella acompañada de sus hijos, sus perros y la nueva incorporación al clan: la pareja de su primogénito
La crónica rosa tiene sus estaciones, y el verano —cómo no— es temporada alta para la familia Iglesias. Mientras Julio se prepara para estrenar su recién adquirida propiedad en Galicia, su esposa, Miranda Rijnsburger, ha aterrizado en Marbella con parte del clan. Así lo cuenta ¡Hola!.
Miranda Rijnsburger con su hija en Marbella
Menos de 24 horas después de que el propio Julio confesara a la revista su decisión de regresar al campo, a sus raíces gallegas —una finca de 1.500 metros cuadrados con lago artificial incluido, situada en Piñor, Orense, cerca de la tierra natal de su padre, el doctor Iglesias Puga—, la exmodelo holandesa llegaba a España con destino muy distinto: Las Cuatro Lunas, la finca familiar en la costa andaluza que huele a buganvilla, discreción y privilegio. Una escapada emocional que el artista ha explicado sin rodeos: «Es que yo me siento gallego», declaró a la revista.
Miranda Rijnsburger
Miranda no venía sola. La acompañaban dos de sus hijos, Miguel (27) y el benjamín, Guillermo, que acaba de alcanzar la mayoría de edad. También sus inseparables perros, Luke y Leila. Pero la escena, que podría haber sido solo una operación logística veraniega de una familia millonaria, incluía un personaje más: Julie Steen, empresaria, modelo y —según parece— pareja formal del hijo mayor. A juzgar por la cercanía entre ellos, Julie ya es una más del clan, e incluso reparte confidencias con su suegra en el aeropuerto como quien viaja en familia desde siempre.
El refugio dorado: Las Cuatro Lunas
La finca en cuestión no es cualquier casa de veraneo. Las Cuatro Lunas es una propiedad de 450 hectáreas, con dos helipuertos, siete habitaciones, ocho baños, servicio permanente y unas vistas que cortan la respiración, tanto al mar como a las colinas de Marbella. Una de las suites, de 400 metros cuadrados, fue el escenario de la noche de bodas del matrimonio Iglesias Rijnsburger, en agosto de 2010.
En su día, la propiedad llegó a anunciarse por 145 millones de euros, pero continúa siendo el cuartel general del clan durante los veranos. A menos de 10 kilómetros del centro de Marbella y a solo media hora del aeropuerto de Málaga, ofrece lo que más valoran los verdaderamente ricos: privacidad, acceso y silencio.
Los cinco hijos del matrimonio suelen alojarse allí cuando las agendas (o las vacaciones universitarias) lo permiten. En redes sociales, son las mellizas Victoria y Cristina quienes más comparten escenas del lugar: paseos a caballo, amaneceres de película y posados en la piscina maravillosos.
