Quién es Manuel Colonques, un hombre clave en la vida de Isabel Preysler

Ha tenido varios grandes amores —Julio Iglesias, Carlos Falcó, Miguel Boyer, Mario Vargas Llosa— y un puñado de episodios románticos que la prensa del corazón aún recita como letanías. Pero la relación más duradera, fiel, estable y sin una sola portada comprometida no ha sido con ningún hombre, sino con una empresa: Porcelanosa. Sí, la firma de azulejos de lujo.

Todo comenzó en 1978, cuando Manuel Colonques, alma empresarial del emporio cerámico y cofundador de la marca junto a su hermano mellizo Héctor, tuvo una intuición brillante: su empresa necesitaba algo más que diseño; necesitaba distinción. Y quién mejor que la reina del papel cuché, educada en convento inglés y con voz de embajadora institucional, para encarnar ese ideal. Se cuenta que el propio Colonques llamó a su puerta, carpeta en mano. Ella, siempre diplomática, dijo que se lo pensaría. Al día siguiente, aceptó. El primer anuncio se rodó en su casa de la calle Arga, en El Viso, junto al árbol de Navidad.

Desde entonces, todo fue sobre ruedas. Ella ponía la elegancia; él, las baldosas. Sin cláusulas de ruptura, sin sobresaltos, llevan más de 45 años de colaboración impecable. Desde recepciones en Buckingham hasta ferias de diseño, pasando por cada showroom de la firma, al que ella acude como si presidiera una gala de Estado. Siempre impecable —ni una arruga en la cara ni en el pavimento—, ha sido presencia constante y silenciosa. Lo que empezó como una campaña puntual se transformó en la alianza más longeva del marketing español.

Detrás de todo, claro, está Colonques Moreno, presidente del Grupo Porcelanosa y empresario discreto, que convirtió a la socialité filipina en su musa de porcelana fina. Ella sigue siendo la gran embajadora, aunque ahora comparte protagonismo con Tamara Falcó, que ha rodado una docena de programas de cocina para la firma, con encimera de diseño incluida. Porcelanosa, por su parte, ha vivido años dorados, llegando a facturar mil millones en tiempos de bonanza y sorteando sin grietas incluso la crisis del ladrillo.

Este sábado 28 de junio, la 'reina de corazones' podría reaparecer en un escenario poco habitual: la plaza de toros de Castellón, donde se celebrará una corrida extraordinaria en homenaje a Colonques, figura clave del desarrollo económico de la provincia y firme defensor de la tauromaquia. En el cartel: José María Manzanares, Cayetano Rivera —que se despide de la plaza— y Andrés Roca Rey, el torero amigo de Victoria Federica de Marichalar más taquillero del momento, lidiarán astados de la ganadería de Domingo Hernández. Una cita de primera fila dentro y fuera del ruedo.

Aunque no sea una apasionada del toreo, ya ha demostrado que por lealtad —o afecto— sabe sentarse en barrera con la misma naturalidad con la que pisa palacios. En 2016 acudió con Vargas Llosa a Las Ventas, acaparando miradas y flashes. En 2018 repitió en la feria de Málaga, saludando a Enrique Ponce y a Jaime de Marichalar como quien saluda al portero de casa. Tras su ruptura con el Nobel en 2022, volvió sola a la Goyesca de Ronda en 2023.

El primer encuentro

Lo más curioso es que fue precisamente Porcelanosa quien propició el primer encuentro entre la gran portagonista de la crónica rosa y el escritor peruano. Corría julio de 2015 y ambos coincidieron en un viaje organizado por la firma con motivo de una recepción con el entonces Príncipe Carlos en Buckingham. Él, recién separado de Patricia Llosa; ella, viuda de Miguel Boyer desde el año anterior. El resto es historia: una relación visible, discreta y muy fotografiada que llenó portadas durante años. Y cuando el autor de La fiesta del chivo falleció en abril de este año, uno de los primeros en acercarse a su casa de Puerta de Hierro fue Colonques.

Manuel Colonques Moreno, nacido en 1942 en Vilareal (Castellón), fundó en 1973 la empresa junto a su hermano mellizo Héctor y su socio, José Soriano. De origen humilde, con raíces en el campo y el comercio local, elevó un taller de azulejos a la categoría de firma internacional. Casado con Delfina Sanz y padre de dos hijos, ha cultivado un perfil bajo y un liderazgo firme. Considerado uno de los grandes industriales del país, ha sido anfitrión de figuras como Sofía Loren, Kevin Costner, Richard Gere o la duquesa de Alba, y asistió a la boda de Guillermo y Kate. Hoy, con 83 años, se ha retirado de la gestión diaria. Pero este sábado, todo volverá a girar en torno a él.