La hija de Manolo Escobar aclara el motivo por el que el cantante casi acaba en la ruina

Manolo Escobar ha sido uno de los cantantes más famosos de nuestro país. Aunque triunfó en su profesión, su vida no ha sido fácil y ha tenido que afrontar algunas situaciones que han empañado su exitosa carrera. Su hija Vanessa García, que también es artista, ha acudido a un conocido programa de Antena 3 donde ha promocionado su nuevo proyecto. A la salida y, frente a los micrófonos de la agencia Gtres, ha aprovechado para arrojar luz sobre cuál fue el principal problema económico de su progenitor, desencadenado por una traición en los años 80.

En su momento, tuvo que hacer frente a un déficit empresarial de 6 millones de euros que dilapidó su fortuna, amasada a base de trabajo y constancia en el mundo de la música. Esta situación se vio motivada porque Escobar, animado por un amigo íntimo, decidió invertir en una fábrica de pantalones vaqueros que quebró. Una tesitura que no le hizo cambiar su forma de ser ni generó desconfianza en él hacia los demás. Tal y como recuerda Vanessa, Manolo Escobar siempre ha sido un hombre muy generoso e incluso ha prestado dinero, aun haciéndole falta a él, a amigos que no se lo han devuelto. Un gesto que deja patente lo buena persona que era.

Movido por el desconocimiento en el ámbito de la empresa, Manolo firmaba papeles sin saber realmente lo que en ellos se reflejaba. En uno de estos se describía un aval personal que fue el principio de su ruina económica. «Su socio no pagó nada ya que puso todos sus bienes a nombre de su mujer y a mi padre le embargaron absolutamente todo», ha recordado Vanessa. Entre estas pertenencias se encontraba un «casoplón» que el intérprete poseía en una elitista urbanización de La Moraleja, en Madrid, y que tuvo que sustituir por un domicilio mucho más modesto. Una fase que la hija del cantante no recuerda porque sucedió cuando ella apenas tenía dos años. «No fui consciente de la mudanza», ha desvelado.

Pese a todo esto, García ha reconocido que a ella «nunca le ha faltado de nada» y rememora a sus padres como dos personas que huían de la ostentación. «Les gustaba ir a Benidorm de vacaciones y hacer un crucero de vez en cuando era una de sus principales ilusiones». Precisamente por eso, perder la casa de la costa alicantina fue lo que más le dolió. Gracias a ese espíritu luchador hacia el que apunta Vanessa, pudieron salir adelante abonando poco a poco la deuda contraída. Una cantidad que recaudó, como no podía ser de otra manera, con esfuerzo, sacrificio y gracias a su agenda repleta de actuaciones. «Él siguió cantando, haciendo teatros en invierno de lunes a domingo y luego en verano tenía giras por los pueblos con casi 100 recitales», ha declarado.

La relación con Isabel Pantoja

En la época de éxito del almeriense, también triunfaron grandes voces, como Rocío Jurado, Lola Flores o Isabel Pantoja. Con esta última, se rumoreó en su día, que no había tenido una buena relación. Unas informaciones que la propia descendiente del cantante de Mi carro ha desmentido.

«Cuando yo era adolescente, mi padre me llevó a ver a Isabel Pantoja a la plaza de toros de Benidorm y pasamos al camerino a saludarla», ha rememorado. «Se dieron un abrazo, me presentó, nos besamos», ha revelado deslizando así la perfecta sintonía que había entre ellos y el trato de favor que les había profesado la tonadillera. «La recuerdo guapísima, espectacular», ha dicho. Siguiendo la misma línea, ha despejado las dudas sobre una supuesta rivalidad con El Fary por su semejanza en la música. «Eran muy amigos y jugaban al mus juntos», ha señalado, disipando las sospechas de los fans.