Susanna Griso
Gente
El paraíso rural en el que Susanna Griso posee tres propiedades
A pesar de residir en la exclusiva urbanización de Ciudalcampo, al norte de Madrid, la presentadora mantiene un vínculo especial con una localidad de Ávila
Aunque su vida transcurre entre los platós y su casa en la exclusiva urbanización madrileña de Ciudalcampo, Susanna Griso ha encontrado un rincón especial en el mapa. En 2020, en plena pandemia, decidió invertir en el sosiego rural adquiriendo tres locales comerciales en Las Navas del Marqués, un municipio abulense de poco más de 5.600 habitantes. La operación fue, a partes iguales, una decisión empresarial y un gesto emocional hacia ese entorno natural que tanto la atrae. Los inmuebles (dos de ellos de más de mil metros cuadrados) albergan hoy un supermercado en el corazón del pueblo.
No cuesta imaginarla paseando por sus calles empedradas, respirando el aire puro que baja de la sierra del Malagón o deteniéndose frente al Castillo-Palacio de Magalia, joya renacentista que domina el paisaje. En ese enclave de pinares y cielos despejados, entre el Mirador Eiffel y las rutas que cruzan la Dehesa Boyal, late una paz que parece hecha a medida para quien vive rodeada de cámaras y titulares.
Susanna Griso
Sin embargo, su refugio cotidiano está más cerca de la capital. La presentadora reside en un exclusivo chalet en Ciudalcampo, una de las urbanizaciones más selectas del norte madrileño. La vivienda, valorada en torno a 1,5 millones de euros, cuenta con 441 metros cuadrados distribuidos en dos plantas y se asienta sobre una parcela de 3.575 metros. Desde su jardín con piscina y vistas a la sierra, hasta la biblioteca, la sala de juegos o los seis dormitorios, todo en la casa refleja el equilibrio entre funcionalidad, confort y discreción que tanto la define.
De cumpleaños
Este 8 de octubre, la periodista sopla 56 velas con la serenidad de quien ha aprendido a equilibrar éxito, familia y vida interior. Frente a las cámaras, sigue irradiando ese temple y esa elegancia que la han convertido en uno de los rostros más sólidos de la televisión española. Desde su trinchera diaria en Espejo Público, que conduce desde 2006, continúa liderando las mañanas de Antena 3.
Detrás de la profesional incansable, hay una mujer de raíces firmes y emociones hondas. Nacida en Barcelona, en una familia acomodada —su padre, industrial del sector textil; su madre, vinculada a la histórica bodega Codorníu—, fue la menor de siete hermanos. Su curiosidad por la comunicación la llevó a estudiar Periodismo en la Universidad Autónoma de Barcelona y a dar sus primeros pasos en Radio Sant Cugat y Catalunya Ràdio. A mediados de los noventa ya se asomaba a las pantallas de TV3 y, poco después, a los informativos de Antena 3 junto a Matías Prats, donde su profesionalidad empezó a brillar con fuerza.
Su historia personal tampoco ha estado exenta de capítulos intensos. Durante más de dos décadas compartió su vida con el empresario Carles Torras, con quien tuvo dos hijos: Jan, nacido en enero de 2003 y hoy con 21 años, y Mireia, de 19. En 2018, la familia creció con la llegada de Dorcette, una niña africana adoptada tras un largo proceso que Griso describe como «una de las experiencias más bonitas» de su vida. Además, ejerce como madre de acogida de Koudus, un joven ghanés que vive con ellos desde hace seis años y que forma parte esencial de ese hogar plural que tanto la enorgullece.
De sus hijos habla con ternura y orgullo. Jan, estudiante de Filosofía en La Sorbona, es «culto, con la cabeza muy bien amueblada»; Mireia, que cursa Política y Economía tras un periodo en Estados Unidos, «una mente brillante con un genio admirable». Y de Dorcette dice que le ha enseñado a mirar el mundo con empatía y calma. «Ellos me han hecho mejor persona», ha confesado más de una vez.