Meghan Markle, en una imagen de archivo
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Meghan Markle se pone en contacto con su padre tras la amputación de una pierna
Fue sometido a la operación después de que un coágulo sanguíneo comprometiera gravemente la circulación
Thomas Markle, padre de la duquesa de Sussex, Meghan Markle, se recupera en Filipinas tras una amputación urgente de la pierna izquierda, una intervención a la que fue sometido después de que un coágulo sanguíneo comprometiera gravemente la circulación, según informó este viernes The Daily Mail.
El veterano técnico de iluminación de Hollywood, de 81 años, fue ingresado de urgencia en un hospital de la ciudad de Cebú, donde los médicos decidieron intervenirlo el miércoles en una operación que se prolongó durante tres horas. Durante el procedimiento, se le amputaron el pie y parte de la pierna inferior al detectarse que el tejido había comenzado a necrosarse, una situación que suponía un riesgo inmediato para su vida.
La información fue confirmada por su hijo, Thomas Markle Jr., quien ejerce como su cuidador principal y ha acompañado de cerca su tratamiento y recuperación. Según confirma la edición británica de la revista ¡Hola!, Meghan Markle ya se habría puesto en contacto con él tras siete años de distanciamiento.
Tras la cirugía, Markle permanece en la unidad de cuidados intensivos, donde continúa bajo observación. Los médicos prevén realizarle próximamente un segundo procedimiento para eliminar otro coágulo localizado en el muslo, lo que mantiene su estado de salud en una situación delicada.
El padre de la duquesa se trasladó a Filipinas a principios de año con la intención de iniciar una etapa más tranquila y económica, alejada —según dijo entonces— del desgaste emocional que le ha generado la larga ruptura con su hija Meghan. La distancia entre ambos se remonta a 2018, año de la boda de la ex actriz con el príncipe Enrique, a la que él no acudió tras posar para unas fotografías pactadas con paparazzi y sufrir posteriormente complicaciones cardíacas.
Thomas Markle, en México
Aquel episodio abrió un profundo distanciamiento familiar que nunca se ha cerrado. Thomas Markle, que además sufrió un derrame cerebral en 2022, no ha llegado a conocer personalmente ni a su yerno ni a sus nietos, Archie y Lilibet, según recuerda el diario británico. A la boda sí asistió la madre de Meghan, Doria Ragland, quien mantiene una relación cercana con la pareja.
Mientras tanto, el Príncipe Harry y Meghan Markle llevan cuatro años asentados en California, tras renunciar en 2020 a sus funciones como miembros activos de la familia real británica. Desde allí desarrollan proyectos editoriales y audiovisuales —incluidos libros y producciones para plataformas como Netflix— y, de momento, no contemplan regresar de manera estable al Reino Unido.
El estado de salud de Thomas Markle vuelve a situar el foco sobre una familia marcada por la distancia, los desencuentros y el silencio, sin señales públicas de una posible reconciliación a corto plazo.
