Soldados ucranianos observan un misil ruso abandonado en la localidad de Berezivka, al suroeste de Ucrania
87 días de guerra en Ucrania
Rusia interceptó y destruyó un cargamento de armas occidentales para Ucrania
Las armas estaban destinadas a la región del Donbás, donde Rusia adquiere cada vez más control
Desde que empezó la invasión en Ucrania, hace ya casi tres meses, Kiev no deja de pedir armamento a occidente.
Sin embargo, los Gobiernos de Europa y Estados Unidos se muestran reacios a enviar sistemas militares al país de invadido, y una de las razones es el miedo a que Rusia intercepte armas potentes y las use contra el ejército ucraniano.
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Sus temores parecieron confirmarse, cuando el Ministerio de Defensa de Rusia anunció que sus fuerzas destruyeron, con misiles de largo alcance, un gran cargamento de armas occidentales en el noroeste de Ucrania.
«Misiles Kalibr de alta precisión y largo alcance, lanzados desde el mar, destruyeron un gran lote de armas y equipamientos militares cerca de la estación de ferrocarril de Malin, en la región de Zhytómyr, enviado por Estados Unidos y países europeos», celebró el ministerio a través de un comunicado.
Agregó que las armas estaban destinadas a las fuerzas urcranianas en el Donbás, en el este de Ucrania, una región rusoparlante que ha estado parcialmente controlada por los separatistas prorrusos desde 2014 y que ahora es escenario de fuertes combates.
Poco a poco, Ucrania ha ido perdiendo su influencia en el Donbás. Su fracaso en la zona se confirmó cuando Rusia anunció haber tomado la planta siderúrgica del Azovstal, último bastión de la defensa ucraniana en Mariúpol.
Con todo, Estados Unidos está actualmente sopesando si mandar sistemas de misil anti navío, para contribuir a la defensa del mar Negro, donde el asedio naval ruso tiene bloqueados los puertos ucranianos. Desde hace meses, el bloqueo impide la exportación de grano y productos agrícolas, y amenaza con provocar una crisis de hambruna mundial.
Para asegurar que las fuerzas rusas no interceptan el armamento, EE.UU. podría entregarlo a través de un aliado europeo.
El gobierno de Vladimir Putin envió tropas a Ucrania el 24 de febrero, afirmando que su objetivo era «desnazificar» el país, que tiene un gobierno prooccidental democráticamente elegido, y proteger a la población de habla rusa.
Los países occidentales han suministrado armas a Ucrania, incluyendo artillería, misiles antiaéreos, armas antitanques y otros potentes equipos, pero el gobierno ucraniano ha estado presionando a sus aliados para que le den más apoyo.
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