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Ana

La Reina Isabel II y su hija la Princesa Ana

El poder silencioso de la Princesa Ana

De carácter algo adusto e impasible, destaca como el miembro de la Familia Real que cumple con más compromisos oficiales. Durante las exequias de Isabel II, su única hija ha ejercido un papel muy visible

Ocupa un lejano puesto 16 en la línea de sucesión al trono, pero su papel como única hija de Isabel II y la segunda mayor de los cuatro hermanos le ha colocado en un lugar preponderante durante el largo período de luto ceremonial. Por expreso deseo de la Reina, a la Princesa Ana le encomendaron la labor de ejercer de escolta oficial del ataúd en su largo viaje por Escocia hasta llegar a Londres. Un papel que la misma Isabel II desempeñó con su padre, el Rey Jorge VI, acompañándole desde Sandringham, donde falleció en 1952.

Mientras Carlos III asumía su nueva condición de Rey, equilibrando el duelo personal con sus deberes de Estado, su hermana Ana, de 72 años, se preparaba para acompañar el ataúd de la Reina desde Balmoral al Palacio de Holyroodhouse, de ahí a la catedral de Saint Giles y finalmente, a Londres.

Vice Admiral Timothy Laurence,  Princess Anne, and Prince Edward in Balmoral during the cortege carrying the coffin of the late Queen Elizabeth II

Timothy Laurence, la Princesa Ana y el Príncipe Eduardo, en Balmoral, frente al féretro de la Reina Isabel IIGTRES

De carácter algo adusto e impasible, en 2021 cumplió con 387 compromisos oficiales, dos más que el entonces Príncipe de Gales con 385. Muy lejos de su padre y su tía, en el tercer puesto, aparecía el Príncipe Guillermo, con 235 actos. Una cifra que en general había ido creciendo para todos, ante los crecientes problemas de movilidad y salud de su madre en su recta final del reinado.

A pesar de su extensa agenda, nunca ha despertado gran atención en los medios, algo que agradece. La Princesa Ana ha cubierto casi 500 visitas al extranjero, 49 solo a Alemania, y representa a más de 300 organizaciones benéficas. Desde 1970 se desempeña como directora de Save The Children de Gran Bretaña. Incluso durante la pandemia visitó algunos puntos donde realizaban tests rápidos de covid.

Intento de secuestro

Mucho más comedida y sensata que su padre Felipe de Edimburgo, sí heredó de él la franqueza a la hora de hablar y expresar su parecer. No pierde los nervios fácilmente. En 1974, durante un intento de secuestro en el vehículo que viajaba y con una pistola apuntándole en la sien, le espetó al agresor que de ninguna manera le daría dos millones de libras porque no las tenía. «Creo que este plan no le va a funcionar», aseveró con frialdad.

Le persigue la fama de ser algo antipática y no soporta que al acudir a los actos le aguarde un enjambre de personas con sus móviles en alto para inmortalizar el momento. Detestaba la prensa y prefería ejercer sus funciones a la sombra. Nunca le gustó que publicitaran su vida y en la medida de lo posible, lo consiguió. Para ser un miembro de la Familia Real más seguida del mundo, su día a día no ha generado grandes titulares.

A diferencia de la siempre coqueta Lady Di, la Princesa Ana nunca se preocupó demasiado por su estética. Se ocupa ella de su maquillaje y peinado y no pierde el tiempo renovando su armario.

Heredó de su madre la pasión por los caballos y, pronto, se convirtió en una habilidosa amazona. En 1971, ganó el campeonato de Europa de concurso completo. «Veía (en la carrera deportiva) el medio de demostrar que tenía algo además de mi familia y que la victoria o la derrota no dependían más que de mi», explicó.

En su primer marido, el capitán Mark Phillips, se fijó gracias a su interés común por la hípica. Fue su compañero en los Juegos Olímpicos de 1972 en los que participó la Princesa Real. Tuvieron dos hijos, Peter y Zara. En abril de 1992, el famoso annus horribilis, firmaba su divorcio. Le costó poco reponerse. Ese mismo año, en diciembre, se casó con Timothy Laurence, un oficial de la Marina y exayudante de la Reina. Les gusta navegar por las costas escocesas. Pero quizá lo más escabroso de su faceta sentimental sea que mantuvo un romance de juventud con Andrew Parker Bowles, futuro primer marido de Camila.

Princess Anne and Zara Phillips during day three of Royal Ascot at Ascot Racecourse. Picture date: Thursday June 16, 2022

La Princesa Ana y Zara Phillips, en Ascot, en junio de 2022GTRES

Cuando ejerció como editora invitada de la revista Country Life por su 70 cumpleaños, subrayó algunas de los problemas que acechan las áreas rurales y pidió que se hiciera más para proporcionar viviendas a las personas locales que «no pueden acceder al precio de mercado».

Comienza a escribir ahora un nuevo capítulo en su vida, en el que emergerá como fiel consejera y gran apoyo de Carlos III, quien nació solo 22 meses antes que ella. Una vez más, se remangará para servir a su país.

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