Merrick Garland Secretario de Justicia de EE.UU.
El Departamento de Justicia de EE.UU. designa un 'fiscal de Trump' para investigar a Biden
Se han descubierto documentos clasificados del Gobierno de EE.UU. en inmuebles del mandatario similares a los incautados a Donald Trump en Florida
El presidente Joe Biden se encuentra en el ojo del huracán tras descubrirse que en un despacho privado en Washington y en un garaje de su mansión en Delaware habían documentos clasificados del Gobierno de Estados Unidos.
Biden defendió almacenar los documentos correspondientes a la presidencia de Barack Obama (del cual fue vicepresidente) diciendo que «no es como si estuvieran sentados en la calle».
La tarde de este jueves, el Departamento de Justicia de la propia administración Biden, nombró un fiscal especial para investigar al el hallazgo de los documentos clasificados que deberían estar en manos de los Archivos Nacionales, tal cual se le reclamó al expresidente Donald Trump.
El secretario de Justicia de Estados Unidos, Merrick Garland, nombró este jueves a un fiscal independiente para investigar el hallazgo de documentos clasificados en una antigua oficina y en una residencia privada del presidente Biden.
Garland dijo que «firmó un documento que designa a Robert Hur como fiscal especial» que «lo autoriza a investigar a cualquier persona o entidad que haya violado la ley» en este caso, dijo en un breve discurso en la sede del Departamento de Justicia.
Un fiscal de Trump
Esta decisión es «de interés público» y era necesaria debido a las «circunstancias extraordinarias», añadió Garland y afirmo que el nombramiento Hur pone de manifiesto el compromiso de su departamento «con la independencia del poder judicial en casos particularmente delicados, y su compromiso de tomar decisiones guiadas únicamente por los hechos y la ley».
Hur forma parte de un despacho de abogados de Washington. Licenciado por la Universidad de Stanford y Harvard, fue fiscal federal en Maryland de 2018 a 2021, un cargo para el que fue designado por Donald Trump.
De 2007 a 2014, mientras fue fiscal federal adjunto en el distrito de Maryland, trabajó en casos relacionados con la violencia de las pandillas, delitos con armas de fuego, narcotráfico y fraude en instituciones financieras y corrupción, según el Departamento de Justicia.
La situación se está complicando para el mandatario, sobre todo por el paralelismo con el caso de los documentos clasificados confiscados en la mansión de Trump con quien el demócrata fue especialmente duro y crítico tras la redada del FBI.
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