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16 de mayo de 2024

Nagorno-Karabaj

Las tropas de Azerbaiyán tomaron posesión de los territorios armenios de Nagorno-Karabaj con un gran desfile militarAFP

Azerbaiyán avanza en sus planes para sustituir a los cristianos armenios de Nagorno Karabaj por musulmanes

El gobierno azerí planea instalar en los hogares y tierras abandonadas por los armenios en su huida a hasta 140.000 musulmanes de Azerbaiyán

Tras la conquista y ocupación de los territorios de Nagorno-Karabaj, de mayoría cristiano-armenia, en la guerra relámpago del pasado mes de septiembre el gobierno de Azerbaiyán avanza en sus planes para sustituir a la población original por musulmanes azeríes.
Tras la derrota del gobierno armenio de Nagorno-Karabaj en los enfrentamientos del 19 y 20 de septiembre, una gran victoria para el presidente azerí Ilham Aliyev, más de 100.000 cristianos-armenios huyeron de sus hogares abandonando una presencia milenaria en la región.
Lograron refugio en territorio de la República de Armenia, pero detrás dejaron todas sus posesiones, además de iglesias y los símbolos de la ancestral presencia armenia en Nagorno-Karabaj.
Ahora el gobierno azerí maneja un plan para ocupar las ciudades armenias abandonadas en los territorios conquistados con población musulmana procedente de Azerbaiyán.
El diputado azerí Vugar Bayramov declaró en una entrevista a una televisión local que el gobierno de Azerbaiyán ha puesto un plan denominado Programa Gran Retorno.
El objetivo es trasladar antes de 2026 a 34.500 familias, unas 140.000 personas, a las tierras y hogares abandonados por los armenios expulsados en septiembre.
Según ese programa, las familias musulmanas que se trasladarán a Nagorno-Karabaj serán «refugiados» de la guerra entre Azerbaiyán y Armenia en los años 90 del siglo XX tras la disolución de la Unión Soviética.
El plan inicial es instalar en la región a 140.000 personas, pero podrían ser más en una segunda fase ya que, según Bayramov, hay hasta 600.000 refugiados internos en Azerbaiyán esperando poder instalarse en los hogares y tierras abandonadas de Nagorno-Karabaj.
«En la primera fase daremos preferencia a las familias con condiciones de vida realmente difíciles». «Se espera que unas 2.000 personas se instalen en la ciudad de Fuzuli antes de fin de año. En este momento ya se han asentado allí unos 1.000 de nuestros ciudadanos. En 2040 esperamos que en la ciudad de Fuzul vivan unos 50.000 de nuestros ciudadanos», declaró.

Nueva guerra

Mientras tanto, crecen los temores a que Azerbaiyán, después de conquistar Nagorno-Karabaj, y alentada por el presidente turco Erdogán y por las prioridades de la comunidad internacional centradas en Ucrania y Gaza, podría intentar invadir territorio soberano de Armenia.
Las autoridades turcas y azerbaiyanas no ocultan sus intenciones de establecer un corredor que comunique ambos países para lo cual necesitan controlar el sur de Armenia, la región de Syunik, y liberar el llamado corredor de Zangezur.
La referencia a los 600.000 refugiados internos de Azerbaiyán a la espera de ser reasentados hace temer a las autoridades armenias un plan secreto de Azerbaiyán de expulsar a la población armenia de Syunik y reasentar en esos territorios a esos supuestos refugiados.
La jugada, sin embargo, podría tener consecuencias inesperadas para Azerbaiyán. A diferencia de Nagorno-Karabaj, territorio que la ONU reconocía como perteneciente a la soberanía de Azerbaiyán, Syunik es un territorio soberano de pleno derecho de Armenia.
Estados Unidos, que en la cuestión de Nagorno-Karabaj se ha mostrado tibia para no molestar a Turquía, aliada de la OTAN, ya ha advertido que no consentirá una agresión y ocupación de la Armenia soberana.
Lo mismo sucede en Europa. Los países de la Unión Europea, que hasta que no se resolvió la cuestión de Nagorno-Karabaj se habían puesto de perfil, han empezado a mostrar una cercanía a Armenia, facilitada también por la decisión del gobierno armenio de romper sus lazos con Rusia.
Por el momento, Francia ha anunciado un paquete de ayuda militar a Armenia para reconstruir su maltrecho Ejército, con capacidades muy inferiores al Ejército de Azerbaiyán, informó EuroNews.
Sin embargo, la prensa afín al régimen azerí está embarcada en una campaña mediática para quitar legitimidad al Estado armenio, similar a la campaña emprendida por Rusia meses antes de iniciar la invasión de Ucrania para negar el derecho del Estado ucraniano a existir.
Periódicos locales como Zerkalo publican análisis y artículos casi a diario donde argumentan que todo el territorio armenio pertenece a Azerbaiyán por derechos históricos. De hecho, se refieren al territorio soberano de Armenia como «Azerbaiyán Occidental» y llaman a expulsar al 100 % de la población armenia, a la que se refieren como ocupantes.
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