El presidente francés, Emmanuel Macron, durante la rueda de prensa
Macron promete una Francia más fuerte con la escuela como ariete: «Los alumnos aprenderán 'La Marsellesa'»
El presidente francés reforzará la autoridad de los profesores franceses imponiendo el uniforme obligatorio, organizando ceremonias solemnes de graduación y enseñando el himno nacional
Una Francia «más fuerte y más justa». Esa frase de Emmanuel Macron resumiría el contenido de la rueda de prensa del presidente francés donde resumió las prioridades de su nuevo gobierno encabezado por el primer ministro Gabriel Attal.
La rueda de prensa se esperaba con gran expectativa después de un primer año y medio de mandato presidencial muy tenso, con las protestas por todo el país contra la reforma de pensiones o la ola de violencia tras la muerte del joven delincuente Nahael M. durante su detención.
Macron quiso dotar al momento de máxima solemnidad presidencial, sentado en su despacho del palacio del Elíseo, flanqueado por las banderas francesa y europea y con el lema de la República, Liberté, Égalité, Fraternité, en grandes letras estampadas a su espalda.
Tras una larga introducción de más de media hora, donde Macron explicó el contexto actual de Francia, el presidente aseguró que «nuestros hijos vivirán mejor que nosotros».
Macron comenzó elogiando a su nuevo primer ministro, Gabriel Attal. Reconoció que el nuevo gobierno es «el más joven de la historia de la Quinta República», pero lo valoró como un elemento positivo, pues dotará a la acción de gobierno de «audacia, acción y eficacia». El objetivo, aseguró, es «que Francia siga siendo Francia».
El presidente francés reconoció que existe en las escuelas francesas un problema de autoridad del profesorado y propuso medidas para reforzar esa autoridad.
En primer lugar, anunció que «en cada escuela media y en cada escuela secundaria, se celebrará una ceremonia de graduación».
Además, anunció que las escuelas públicas enseñarán a los alumnos el himno francés, La Marsellesa.
Además, se implementará el uniforme obligatorio a todos los alumnos de las escuelas públicas francesas, una implementación que será paulatina y que comenzará con una prueba en 100 centros escolares.
En ese sentido, abogó por una convivencia entre el modelo público y el privado de educación, y recordó que él mismo es «hijo de ambas escuelas». «Fui a la escuela laica y a la privada. En ambas vi profesores comprometidos a los que les debo mucho».
Por otro lado, anunció medidas para reforzar la natalidad y sacar a Francia del pozo demográfico en el que se encuentra. En ese sentido, anunció un nuevo permiso de paternidad de seis meses. En concreto, Macron habló de un auténtico «rearme demográfico» en Francia.
Macron también adelantó una «mejora de las medidas sociales y fiscales» para promover un progreso basado en «el esfuerzo y el mérito» para permitir a los franceses «ganarse mejor la vida mediante el trabajo». Anunció una bajada de impuestos por 2.000 millones de euros para las clases medias.
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