
Preparativos para el desfile del 250 aniversario del Ejército de EE.UU.
6.000 soldados, 50 aviones y 100 tanques, así será el desfile de los 250 años del Ejército de EE.UU. y el cumpleaños 79 de Trump
Vuelos suspendidos, navegación en el río Potomac interrumpida, casi 30 km de vallas: Washington estará en modo pausa para la ocasión
Los primeros soldados y tanques de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos llegaron el miércoles a Washington para participar este sábado en el desfile militar organizado por el presidente, Donald Trump, con motivo de los 250 años del Ejército estadounidense y que coincide con su 79 cumpleaños.
El centro de la capital se convirtió en algo más parecido a una base militar en la que se asoman, entre los carros de combate, algunos de los monumentos más emblemáticos de la Explanada Nacional, pero previsiones de tormentas eléctricas y las manifestaciones en el país contra sus redadas migratorias podrían aguarle la fiesta.

Un blindado del Ejército de EE.UU. estacionado en el National Mall de Washington
Se estima que el desfile contará con unos 6.600 soldados, 50 aviones de guerra y 150 vehículos pesados y que tenga un coste de entre 25 y 45 millones de dólares.
Los militares van a ser alojados durante unos días en varios edificios públicos de la capital federal, como el Departamento de Agricultura.
Como parte de los preparativos se han instalado placas de hierro en la calzada para que los tanques no dañen el asfalto de las calles de la capital estadounidense.
Solo un tanque Abrams, uno de los modelos que hay desplegados ahora mismo en el centro de la ciudad, pesa aproximadamente 68 toneladas.
Esto podría dañar el asfalto especialmente cuando giren estos vehículos, según explicó a Efe el coronel Jesse Curry, del Cuerpo de Ingenieros del Ejército a una emisora de radio local.
Vuelos suspendidos, navegación en el río Potomac interrumpida, casi 30 km de vallas: Washington estará en modo pausa para la ocasión
Además, el Servicio Secreto, encargado de proteger al presidente, instalará 18 millas de vallas antiescalada y volará varios drones ese día para velar por la seguridad. El Distrito de Columbia, donde se encuentra Washington, tiene restricciones para volar drones habitualmente.
Delante de la Casa Blanca los trabajadores se apresuran a construir una tribuna presidencial, coronada por una enorme lona con el logo del Ejército, desde donde Trump presidirá el desfile.
La tarima es similar a la que se preparó para la investidura de Trump, el pasado enero, pero que finalmente no se utilizó porque todos los actos de se celebraron a puerta cerrada por las bajas temperaturas.
Durante su primer mandato (2017-2021), Trump ya quiso organizar un desfile militar en Washington, aunque la idea se fue posponiendo y finalmente quedó desechada por su elevado coste.

Las imágenes del presidente Donald Trump y del expresidente Abraham Lincoln en el edificio del Departamento de Agricultura en Washington DC.
Estados Unidos no organiza un desfile militar a gran escala desde junio de 1991, después de ganar la primera Guerra del Golfo y con George Bush padre en la Casa Blanca.
En esa ocasión, 8.800 militares desfilaron por el centro de Washington en un acto que congregó a unos 200.000 espectadores, según recuerda el The Washington Post.
Aun así, no son algo habitual en Estados Unidos. Los hubo después de la guerra civil estadounidense, en 1865; una vez finalizada la Primera Guerra Mundial en 1919 y también en 1946, después de la Segunda Guerra Mundial.