Veintiséis países acuerdan enviar tropas a Ucrania y garantizar su seguridad «por tierra, mar y aire»

La coalición de voluntarios, es decir, los países dispuestos a dar garantías de seguridad a Ucrania en caso de que se llegue a un acuerdo de paz con Rusia, se reunieron este jueves en París para dar un nuevo impulso a la diplomacia. Tras una intensa jornada, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, anunció que veintiséis países se han comprometido a enviar tropas al país invadido y estar presentes «en tierra, mar y aire».

Macron informó de que estas naciones, en su gran mayoría europeas, se mostraron dispuestas a participar en una «fuerza de refuerzo» como parte de un futuro alto el fuego ruso-ucraniano, mediante el despliegue de soldados en suelo ucraniano. «Esta fuerza no tiene la voluntad ni el objetivo de librar ninguna guerra contra Rusia», aclaró el presidente francés durante una rueda de prensa en París posterior a la cumbre.

Esta cita, que se presentaba crucial para desatascar la difícil situación en la que se encontraba el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, tras el encuentro entre su homólogo estadounidense, Donald Trump, y el ruso Vladimir Putin, el pasado mes de agosto, ha contado con la presencia de hasta una treintena de países, incluidos Australia, Japón y Canadá. El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, tenía previsto asistir personalmente a la capital gala, pero una avería en el avión le ha obligado a volver y participar en la cumbre de manera telemática.

Una vez finalizado el encuentro entre la naciones que forman parte de la bautizada como coalición de voluntarios, los líderes europeos mantuvieron una videoconferencia con Trump, a quien instaron a aumentar la presión sobre Rusia. Previamente, Zelenski ya se había reunido con el enviado especial del presidente estadounidense, Steve Witkoff, en los márgenes de la cumbre de París. Algunos países, como Italia, se habían mostrado reticentes a apoyar la coalición ante las dudas de garantías de seguridad por parte de Estados Unidos.

Macron despejó este jueves cualquier tipo de incertidumbre y aseguró que Washington «ha sido muy claro en su deseo de formar parte de las garantías de seguridad». El papel que jugará la gran potencia mundial, matizó el mandatario galo, se concretará en «los próximos días». El presidente galo evitó dar más detalles sobre cómo se organizará este despliegue para no exponerse ante Rusia. «Es nuestra línea de defensa y la de Ucrania», se justificó Macron, ante las insistentes preguntas de los periodistas. «Tenemos una planificación militar. Está ahí y no es solo una declaración de principios, existe una planificación sólida», aclaró.

A pesar de ello, la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, se descolgó del anuncio y reiteró su negativa a enviar tropas a Ucrania, pero aseguró que puede aportar otras garantías ante un posible alto el fuego con «iniciativas de vigilancia y entrenamiento fuera de las fronteras». En este sentido, Meloni insistió en la necesidad de «mantener la presión colectiva sobre Rusia, incluso mediante sanciones», así como ofrecer «garantías de seguridad sólidas y creíbles, que se definirán conjuntamente a ambas orillas del Atlántico».

Así, y tras este importante paso para el futuro de su país, Zelenski agradeció a todos los presentes en la cita «su importante labor, por apoyar a nuestro pueblo y por su disposición a seguir apoyando a Ucrania y ayudándonos a proteger vidas». «Creo que hoy, por primera vez en mucho tiempo, se trata del primer paso concreto tan serio», subrayó. El ucraniano se encargó de reconocer especialmente la labor del presidente Trump «por todos sus esfuerzos para poner fin a esta guerra y por la disposición de Estados Unidos a brindar apoyo a Ucrania por su parte».

El ucraniano además señaló que el presidente estadounidense pidió que las naciones europeas dejen de comprar petróleo ruso. «Trump está muy descontento con que en Europa se compre petróleo ruso», y nombró concretamente el caso de Hungría y Eslovaquia. «Sin duda, estoy contento de que Estados Unidos haya hablado de forma totalmente abierta, nombrando a estos países», dijo Zelenski, que acabó su intervención con un: «Tenemos que parar esto».

Rusia, tan solo horas antes de que se celebrara la cumbre, ya había rechazado cualquier tipo de presencia de tropas en el país invadido. «Rusia no va a discutir algo fundamentalmente inaceptable que socava cualquier tipo de seguridad, una intervención extranjera en Ucrania en cualquier forma o formato», zanjó la portavoz de Exteriores de Rusia, Maria Zajárova. «No son garantías para la seguridad de Ucrania, son garantías de peligro para el continente europeo», declaró Zajárova a modo de advertencia.