El presidente de Irán, Masoud Pezeshkian, durante su discurso anual a la nación con motivo del Nowruz
Irán califica de «ridícula y absurda» la acusación de que intentó asesinar a la embajadora de Israel en México
Tres días más tarde de que el Gobierno de Estados Unidos señalara con el dedo acusador a Irán por intentar asesinar a la embajadora de Israel en México, el régimen de los ayatolás ha reaccionado. Teherán, como no podía ser de otro modo, niega todo.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Irán tachó el lunes de «absurda» la acusación de Estados Unidos sobre una conspiración de Teherán para intentar asesinar a la embajadora israelí en México.
«Consideramos esta acusación muy ridícula y absurda», afirmó el portavoz de la cancillería, Esmail Baqai, que lo enmarcó en una supuesta estrategia para «destruir las relaciones amistosas de Irán con otros países».
Tras la acusación de Washington el viernes sobre el intento de asesinato, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Israel agradeció a las autoridades mexicanas «por desbaratar una red terrorista dirigida por Irán».
Pero más tarde, la Cancillería de México afirmó «no haber recibido información» sobre el presunto complot, y la embajada de Irán en México lo calificó de «una gran mentira».
Un funcionario estadounidense señaló que la Fuerza Quds, unidad de élite del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán, inició el complot a finales de 2024 y que este fue frustrado a principios de este año.
El presunto complot implicaba reclutar operativos a través de la embajada de Irán en Venezuela donde Nicolás Maduro, mantiene una alianza táctica con Teherán. «Todo el asunto fue fabricado», destacó Baqai el lunes.
A mediados de junio, Israel lanzó una campaña de bombardeos sin precedentes contra Irán, lo que desencadenó una guerra de 12 días durante la cual Estados Unidos participó brevemente con ataques contra plantas subterráneas nucleares iraníes. Desde el 24 de junio está vigente un alto el fuego entre Irán e Israel.