
Hidrogenera Hyundai
Combustible alternativo
El fiasco del coche de hidrógeno… y los dos que ya puedes comprarte en España
En Estados Unidos se están replanteando la viabilidad del coche de hidrógeno ante la dificultad del repostaje
Llevamos años oyendo hablar del hidrógeno como parte del futuro del automóvil. De hecho, puede que ya forme parte del presente del automóvil. En el norte de Europa, la venta de coches movidos por este combustible cada vez son mucho más habituales. Aunque todavía entran dentro de la categoría de anecdóticas. Y eso que allí la red de hidrogeneras está más extendida.
En España no podemos hablar ni de anecdóticas, pues a finales del año pasado el censo de coches de hidrógeno en España se reducía a 15 unidades.
Realmente hay que distinguir entre dos tipos de tecnologías motrices derivadas del hidrógeno. Por un lado, están los coches de pila de combustible como el Toyota Mirai y el Hyundai Nexo, los dos modelos a la venta en España. Se trata de coches eléctricos que sacan la energía eléctrica de una reacción química que usa el hidrógeno como combustible.

Hidrogenera Hyundai
Hyunda Nexo y Toyota Mirai están a la venta en España desde hace años, aunque la escasez de hidrogeneras los hace inviables. A día de hoy hay seis hidrogeneras en nuestro país; Albacete, Ciudad Real, Huesca, Madrid, Sevilla y Zaragoza.
Se trata de instalaciones complejas y realmente caras de construir, lo que impide su implantación. Además, el hidrógeno es un gas ‘delicado’ de manipular. Se maneja siempre a alta presión, lo que obliga a tener tanques muy especiales así como un transporte logísticamente complejo.

Anuncio de Kia y Mireia Belmonte
La explosión de una hidrogenera en Noruega en 2019 ralentizó los planes de expansión de este combustible en Europa hasta que se aclararon los hechos ocurridos. Incluso supuso el cierre de todos los surtidores de hidrógeno hasta el final de la investigación, y tanto Hyundai como Toyota detuvieron las ventas de sus modelos de hidrógeno.
Como ya declaró Toyota en su momento, lógicamente se trata de un gas inflamable que se maneja a muy alta presión, pero si se siguen los protocolos adecuados no es más peligroso que la gasolina. De hecho, los tanques de combustible de hidrógeno que montan los coches pasan test tan extremos que incluyen disparos con armas de fuego.
Los coches de hidrógeno no emiten ningún gas contaminante a la atmósfera, su única emisión es vapor de agua. Sí, simplemente agua que es evacuada a través de un sistema de escape muy sencillo. Todos recordamos la imagen de Mireia Belmonte respirando los gases emitidos por un Nexo en pleno entrenamiento, en lo que fue una de las campañas publicitarias más impactantes que se recuerdan.

Toyota Mirai
A día de hoy, y como coche sin emisiones que son reciben la etiqueta CERO de la DGT y pueden acogerse a los diferentes planes de ayuda como el Moves III. Otras ventajas importantes.
Hyundai Nexo
Se trata del primer coche de pila de combustible que llegó a España en 2018. Es un SUV de hidrógeno con un precio de venta de 69.000 euros. Dispone de un motor de 163 caballos que se alimenta con una pequeña batería que a su vez es cargada por la pila de combustible gracias al hidrógeno. En este caso, el hidrógeno que alimenta el sistema se almacena en tres tanques de 52,2 litros cada uno bajo el maletero y los asientos traseros. Tiene una autonomía de 666 kilómetros con 179 kilómetros/hora de velocidad máxima y hace el 0-100 kilómetros/hora en 9,2 segundos.
Toyota Mirai
Estamos ya ante la segunda generación de este modelo, que cuenta con una larga tradición en materia de hidrógeno. Se puso a la venta en 2021 y es rival de coches como el Audi A6 o el Mercedes Clase E. Cuesta 69.000 euros. Tiene una potencia de 180 caballos, con una autonomía de 650 kilómetros, una velocidad máxima de 192 kilometros/hora y un 0-100 de 9,2 segundos. Almacena hasta 142 litros de hidrógeno.
Es importante matizar que el coste del hidrógeno no es gratuito ni mucho más barato que la gasolina. A día de hoy en Madrid cuesta en torno a los 10 euros/kilos. Con un consumo en el caso del Mirai de 0,79 kilos a los 100 kilómetros se obtiene un consumo cercano a los 8 euros a los 100 kilómetros.
Por países, Corea del Sur con 60 hidrogeneras y Japón con 142 son los dos paraísos de un tipo de vehículos cada vez más habituales. En cambio, en California hay una ola de desencanto generalizado que ha llevado a marcas como Honda a dejar de comercializar su modelo Clarity.
Toyota, por su parte, entrega una tarjeta de hidrógeno por valor de 15.000 dólares para que reposten su coche nuevo, con lo cual el precio final del vehículo resulta irrisorio. Además, Toyota ofrece ¡grúa gratis! hasta la hidrogenera más cercana si te quedas sin combustible.
Problemas como la temperatura exterior afecta profundamente al funcionamiento de los surtidores y si hace mucho calor debes esperar horas para que se enfríen y poder repostar.
Allí las colas que hay en las pocas hidrogeneras en funcionamiento, porque el sistema de reparto no acaba de funcionar, ofrecen más de dos horas de espera. De hecho, Elon Musk llama a las pilas de hidrógeno «pilas bobas». Un panorama no demasiado halagüeño para una tecnología que prometía mucho. Algo parecido a lo que ocurrió en su día con los híbridos como el Toyota Prius, un coche que a día de hoy se ha convertido en líder indiscutible.