En un momento muy delicado para el automóvil inglés, los políticos le dan la espalda

En un momento muy delicado para el automóvil inglés, los políticos le dan la espalda

Escándalo

Ni Mini, ni Jaguar… los políticos británicos huyen de los coches ingleses y se quedan con esta marca

Ni eléctricos ni fabricados en la isla, así son los coches coreanos que ha compra el Gobierno y que han enfadado a la ciudadanía

El Gobierno británico no pasa por su mejor momento. El último de los desencuentros con la ciudadanía se ha producido cuando se ha hecho público el listado de coches oficiales que ha comprado el Gobierno para los políticos del Parlamento e instituciones oficiales.
Se trata de un listado que convierte a la firma coreana Kia en socio estratégico de movilidad del Gobierno, pues el 82 % de los vehículos que acaba de adquirir el Gobierno central llevan el anagrama coreano sobre el capó.

Socio oficial de Whitehall

El Gobierno trata de quitarle importancia al asunto diciendo que esta compra de 680 vehículos supone la electrificación del 25 % del parque móvil del Estado.
Pero la sociedad británica ha hecho otra lectura mucho más realista, y es que el Gobierno ha dado la espalda a la industria automovilística local, una industria que se encuentra en un momento muy delicado tras el Brexit, pues no encuentra aliados naturales para colocar los coches fabricados en Reino Unido, que ya sufren incluso cupos y aranceles a la importación en algunos países.
Ni siquiera el Mini eléctrico ha convencido a los políticos ingleses

Ni siquiera el Mini eléctrico ha convencido a los políticos ingleses

Menos de un 5 % de los 680 coches recientemente adquiridos están fabricados en la isla, en concreto solo 32 son de origen británico, y entre ellos no se cuenta ni un solo Mini eléctrico, el que fuera modelo estrella hace tan solo unos años.

No son eléctricos, son híbridos

La ciudadanía acusa también al gobierno de trabajar de cara a la galería, pues cuando hablan de comprar coches eléctricos realmente se refieren a coches híbridos enchufables, para no tener problemas de autonomía y sin tener en cuenta el elevado consumo de este tipo de automóviles cuando están sin batería, a causa del elevado peso del conjunto motriz.
De hecho, tan solo el 20 % de los coches comprados son eléctricos puros, lo que evita a los políticos ingleses sufrir la ansiedad que sí tienen los conductores normales a causa de la escasez y mal funcionamiento de los puntos de recarga en la isla. Todo ello cuando los particulares ya compran más del doble de coches 100 % eléctricos que electrificados a cuenta de las numerosas ayudas fiscales con las que cuentan.
Nuevo Kia Niro, el modelo más vendido

Nuevo Kia Niro, el modelo más vendido

Al final Kia sale muy beneficiado de esta operación en la que logra colocar 450 automóviles, facturando algo más de 23 millones de euros.
La flota del 5 % de coches fabricados en la isla está compuesta por 25 Nissan Leaf, a 33.000 euros la unidad y siete Land Rover Discovery a 53.000.

Ni eléctricos, ni ingleses

En cuanto a los coches 100 % eléctricos no fabricados en la isla, el pedido está compuesto por 36 Jaguar i-Pace de 73.000 euros, tres Genesis GV60 de 55.000 euros y cuatro Tesla Model 3 de 45.000 euros.
Preguntado por esta compra cuanto menos cuestionable, el portavoz del Gobierno británico se ha limitado a responder que la compra ha estado marcada por «el presupuesto y los requisitos operativos, dos factores que han convertido a Kia en el proveedor de coches preferido por el Gobierno».
El Gobierno señaló también que anticipando una vida media para esta flota entre tres y cinco años, la previsión es que el 100 % de sus coches sean eléctricos en 2027.
Comentarios
tracking