Rotonda en Torremocha del Jarama controlada por una cámara que está gestionada por una empresa especializada en multar
Sanciones
Peores que la DGT: algunos ayuntamientos contratan empresas a comisión para poner multas y cobrarlas
Empresas especializadas en poner multas hacen su agosto a costa de los ayuntamientos que delegan en ellas la posibilidad de poner sanciones y cobrarlas
Tanto el impuesto de circulación como la gestión de las multas constituyen dos fuentes de financiación clave para los ayuntamientos, cada vez más necesitados de ingresos extraordinarios.
Para hacerse una idea del volumen monetario que supone, el ayuntamiento de Madrid recaudó 199,2 millones de euros en multas en 2022, líder absoluto frente a Barcelona, que recaudó 62 millones o Sevilla con 22.
Las multas crecen
La apuesta en funcionamiento de las Zonas de Bajas Emisiones no va a hacer sino engordar esta cifra, pues desde su puesta en funcionamiento son miles los conductores que han recibido una sanción de 200 euros en su domicilio sin ni siquiera saber que habían cometido un 'delito'.
Cada vez mayor número de municipios cuenta con cámaras de control del tráfico
Ayuntamientos más pequeños y sin tantos recursos económicos que en ocasiones no disponen ni de Policía Municipal propia no quieren renunciar a su parte del pastel, con lo que llevan a cabo curiosos acuerdos que fueron puestos sobre la mesa a raíz del descubrimiento de un coche radar particular en el pueblecito toledano de Cazalegas hace menos de un año.
El modus operandi es muy sencillo, y en ningún caso es nuevo, sino que algunas grandes ciudades como Madrid lo llevan usando desde años, aunque en este caso la función de la empresa externa se limita a la gestión de cobros.
El coche radar particular de Cazalegas levantó la liebre
En el caso de los pequeños municipios, las corporaciones entran en contacto con empresas como CGi o Vialine, que se encargan de dar soporte a las corporaciones locales para solucionarles determinados servicios a cambio de un coste económico, como es lógico.
Empresas de servicios
Los acuerdos pueden variar en función de las necesidades del pueblo y de la propia empresa, pero en el servicio 360 grados la empresa se encarga desde la instalación de las cámaras o radares, su homologación y funcionamiento, hasta la posterior gestión y el cobro de las multas a los conductores, incluso por vía judicial.
El ayuntamiento se limita a decirle el tipo de servicio que necesita y llegar a un acuerdo económico, que en ocasiones supone que la empresa comparte el 50 % de los ingresos con la corporación. En este caso el alcalde del pueblo lo único que debe hacer es firmar la multa, lo cual le da validez.
La cámara 'privada' en Torremocha del Jarama, Madrid
Este es un detalle clave, pues las empresas privadas no pueden poner multas a particulares ni mucho menos darles carácter oficial, por lo que es obligada la firma el alcalde.
Una vía recaudatoria en cualquier caso que permite a los ayuntamiento hacerse con unos ingresos extras en épocas muy concretas como el verano con la llegada de los inocentes turistas.
Este mecanismo está ya en funcionamiento en centenares de municipios, como Navacerrada, Punta Umbría, Torremocha del Jarama...
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