Así es el truco de la Coca Cola para quitar con facilidad las pegatinas del parabrisas

Parece mentira que a día de hoy nadie en la DGT haya caído en lo incómodo que resulta quitar las pegatinas viejas de la ITV, un gesto que en el mejor de los casos hacemos cada dos años en nuestro automóvil, siempre que tenga más de cuatro años, eso sí.

El pliego de condiciones de las pegatinas redactado por las ITV debe solicitar un pegamento válido incluso para parabrisas de lanzaderas espaciales, pues sino es inexplicable que una vez que adhieres el pequeño distintivo sólo hay una forma de quitarlo: romperlo.

A prueba de viajes espaciales

Algo parecido ocurre con las etiquetas medioambientales de la DGT, con el problema añadido de que estas pegatinas se deterioran con facilidad, algo que puede suponernos una multa en caso de no ser visible con claridad.

Conviene saber que la DGT también sanciona por amontonar pegatinas de la ITV en el parabrisas, con lo cual más vale no convertir el parabrisas en la capilla de un torero con estampitas de la ITV.

Trabajo de chinos

De cualquier manera, retirar las pegatinas es tan laborioso que conviene saber algunos trucos. Un simple secador de pelo puede ayudar a quitarlas, pero hay que tener en cuenta que el coche no tiene enchufes, por lo que necesitamos un secador con pilas o baterías, algo complicado.

Hay otro truco mucho más sencillo y funcional. Basta con empapar una bayeta con Coca Cola (normal) y frotar ligeramente la pegatina. En este caso la retiraremos con suma facilidad con la ayuda de una espátula de plástico, la Coca Cola reblandece el material y resulta muchísimo más fácil de quitar.

Una medida de emergencia hasta que alguien en la ITV se dé cuenta de que para uno o dos años no es necesario un pegamento que podría mantener pegado un camión a la pared de un edificio. Así de sencillo y así de funcional.