Práctico
Hace ya tiempo que llegó hasta las estaciones de servicio y comercios de mecánica rápida en general un nuevo producto destinado a facilitar las operaciones de mantenimiento de los automóviles.
En este caso se trata de detergente en pastillas que sirve para facilitar el rellenado del depósito de líquido limpiaparabrisas de un automóvil. Estas pastillas permiten rellenar el depósito con simple agua siempre que añadamos después una de ellas.
Una vez disuelta, el líquido adquiere las propiedades necesarias para limpiar el parabrisas del coche. Estas pastillas llevan también productos químicos que reducen la temperatura de congelación de la solución, lo que evita problemas en invierno.
De hecho jamás debemos rellenar este depósito con agua sola, pues si se congela reventará el depósito, provocando una avería de consideración.
En este caso no han faltado los conductores que han creído ver en las pastillas del friegaplatos la solución perfecta para sus coches, de esta forma rellenan el depósito de líquido con agua y añaden una simple pastilla de lavavajillas.
Se trata de un gran error por dos motivos. El primero de ellos es que algunas de estas pastillas tienen un envoltorio plástico que no se disuelve en el agua con facilidad, lo que provoca rastros plásticos que podrían bloquear los conductos de agua.
Hay que tener en cuenta que los conductos por los que pasa el agua hasta llegar a los orificios por los que sale proyectado hacia el parabrisas son muy finos y un atasco supondría cambiar todo el sistema.
Por otro lado este producto no está pensado para este uso, por lo que por ejemplo no reduce la temperatura de congelación del líquido del limpiaparabrisas, lo que como ya hemos dicho podría provocar un problema en invierno.
De la misma manera tampoco es recomendable añadir un chorro del lavavajillas normal al agua. Merece la pena gastar en líquido específico para este uso, que además de ser barato lleva químicos que eliminan los restos de aceites y grasas y permiten desprender las partículas de microplásticos y el alquiltrán que se acumula en las carreteras.
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