El aspecto del nuevo BMW XM es sencillamente brutal
BMW XM El desmesurado SUV híbrido con vitamina M
Día histórico para la división M de BMW, que lanza uno de los SUV más brutales y espectaculares que hay en el mercado
Con motivo del 50 aniversario de la división M de BMW, que tuvo lugar el 2022, el departamento de preparaciones deportivas de BMW planteó el lanzamiento de un nuevo modelo a imagen del mítico M1 de 1978.
Tal y como marcan los tiempos, el modelo debía tener carrocería SUV y estar electrificado, características que han tomado forma en el XM, el primer vehículo electrificado creado por la mítica división germana y que promete no ser el último, pues sus ventas serán electrificadas al 50 % en 2027.
Hasta M se electrifica
Tras matricular casi 180.000 unidades en 2022, un 8 % más que el año pasado, la marca alemana afronta ahora uno de sus retos más importantes, el de la electrificación y visto lo visto queda claro que va por el buen camino.
La parte trasera es aún más imponente que la frontal
Respecto al XM basta decir que su mera presencia impone. No podía ser de otra forma en el que está llamado a ser un buque insignia para M, un vehículo sencillamente brutal con datos tan significativos como que dispone opcionalmente de llantas de 23 pulgadas, uno de los pocos automóviles en el mundo capaz de albergar unas llantas que si fueran una paellera daría de comer tranquilamente a diez o doce comensales.
Tan grande como rápido
Para su desarrollo se ha partido de la base del X7, un verdadero mastodonte del asfalto sobre el cual M ha vertido todo su conocimiento en preparaciones deportivas sin escatimar lo más mínimo. De ahí que la factura final del coche se acerque peligrosamente a los 180.000 euros.
No recordamos otro BMW con la parrilla más grande que este
En el frontal la inmensa parrilla doble cobra protagonismo, con unas lamas muy separadas que dejan ver algunos componentes del motor. El gigantismo del doble riñón contrasta con los minúsculos grupos ópticos, generano un efecto sencillamente brutal.
La trasera queda presidida por el inmenso logo XM y también por unas formas muy personales y novedosas para el fabricante alemán.
Interior soberbio
Pero es dentro donde descubrimos que algo ha cambiado en BMW y en el automóvil en general. La carrocería de 5,11 metros de largo por 2 de ancho y 1,75 de alto albergan un habitáculo que no es extremadamente amplio pero que ofrece cuatro plazas reales, y no decimos reales por su amplitud, que también, sino porque son dignas de reyes.
El interior combina materiales deportivos y tecnológicos, todos de excelsa calidad
Empezamos por una calidad de acabados excelente en la que se combinan materiales que reflejan el lujo más tradicional, como la madera o la piel, con otras fibras sintéticas y aluminio mucho más tecnológicos, todo ello ensamblado con mucho gusto y no exento del componente deportivo que corresponde a BMW.
Embutidos en lujo
Al volante quedamos envueltos por una consola central que es el verdadero cerebro de la bestia desde la que podemos controlar todo el conjunto mecánico y por dos pantallas, una frontal de 12 pulgadas que sirve de cuadro de instrumentación y otra central multimedia de 14 pulgadas.
Futbolista, famosos y ricos en general entre sus clientes objetivos
Este modelo no se aleja un ápice de la tradición M, pues nos permite seleccionar cada detalle del comportamiento del coche, desde la dureza de la suspensión hasta el comportamiento del motor, la frenada e incluso la rapidez del cambio.
No hay carretera para este coche
Añade además un selector más que nos permite elegir el modo de funcionamiento del motor híbrido, dando prioridad al motor eléctrico de 197 caballos, al V8 de gasolina de 489 o a una opción que permite que funcionen de manera simultanea, lo que despliega 653 caballos bajo el pedal del acelerador. Algo después llegará una versión aún más potente con 748 caballos.
Podemos personalizar la deportividad de las respuests del XM, incluida la suspensión
Disponemos incluso de un pulsador que potencia el sonido del escape en el interior, lo que lo convierte en una verdadera orquesta sinfónica.
Sobre el asfalto el XM es tan bruto como parece. Los 653 caballos llegan en tromba según rozamos el acelerador, ayudado por el empuje instantáneo del motor eléctrico y acompañado del empuje sostenido del gasolina.
Esencia M
Sin duda estamos ante un más que digno miembro del selecto club M, un coche que aunque pesa más de 2.600 kilos se siente ligero y ágil, aunque no pequeño, pues sus reacciones son tan brutas e instantáneas que hacen que cualquier carretera que no sea un autopista de cuatro carriles se nos quede pequeña.
Capítulo aparte merecen las ruedas de 23 pulgadas, una verdadera frivolidad que más allá de lo estético hacen que sus respuestas sean instantáneas e incluso violentas en lo referente a la dirección, algo a lo que nos acostumbraremos rápido.
Llantas de 23 pulgadas... una barbaridad
Todo ello por un precio de 179.900 euros, mucho o poco depende del bolsillo de cada uno. Aunque como declaración de intenciones fue presentado en la Ciudad Deportiva del Real Madrid… ¿en busca de clientes caprichosos y futbolistas?
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