
EL nuevo Ebro s700, un SUV de dimensiones medias
Al volante
Así va el nuevo Ebro s700: el primer coche chino fabricado en España
La primera colaboración chino-española apuesta por unos acabados por encima de su precio para seducir a los futuros compradores
Los nuevos dueños de la mítica firma Ebro lo tienen claro: «Queremos devolver una marca española a las carreteras», aseguraba el presidente de la compañía, Pedro Calef, este miércoles en Barcelona, en la presentación a la prensa del Ebro s700, el primer modelo de la nueva etapa de la empresa.
Es un coche, recordemos, producido en la antigua planta Nissan de la Zona Franca de Barcelona, recuperada gracias a un acuerdo con la firma china Chery. Los coches vienen desde el país asiático por partes y una vez en tierras catalanas se ensamblan y comercializan por toda España. La intención confesa de la cúpula de Ebro es aumentar la planta y que lo nacional vaya ganando peso en el proceso de fabricación –y decisión–, pero conseguir que los chinos cedan dependerá de las ventas de sus coches, empezando por el Ebro s700.
Por el momento, las sensaciones al volante confirman la estrategia de la marca: ofrecer acabados de calidad pero al precio del segmento inferior. En concreto, la versión básica del Ebro s700 cuesta 29.900 euros, que escalan hasta los 32.990 euros en su modelo luxury, aunque la firma apuesta por una oferta de lanzamiento financiada que se ofrece a partir de 27.900 euros.

EL Ebro s700 es muy tecnológico, con doble pantalla
Por este precio se ofrece un compacto sólido y elegante, de líneas clásicas, en el que lo primero que destaca es el salpicadero, diseñado con intención de ser icónico, en conjunto con un panel de luces traseras que recorre de lado a lado la trasera del vehículo. El s700 mide 4,55 metros de largo por 1,86 de ancho y 1,69 de alto, y presume de extras propios de una gama alta.
Entre estos destacan el techo solar, de más de un metro cuadrado; un completo despliegue de sistemas de ayuda a la conducción y seguridad, o un equipo de sonido «personalizado por Sony» y dotado de un chip Qualcomm Snapdragon 8155 SoC, insisten en el argumentario de ventas. Todo ello se suma a unos acabados interiores sorprendentes y a algunos añadidos agradecidos, como el control por voz o un sistema de luz ambiental con 64 tonalidades.
Garantía de siete años
A una conducción solvente –en la prueba el vehículo se comportó sin alardes, pero también sin complicaciones– se le suma el doble argumento con el que desde Ebro esperan convencer a los clientes recelosos: una garantía de siete años o 150.000 kilómetros, sumada a un plan de expansión de concesionarios muy ambicioso por toda España, para poder dar servicio de reparación sin retrasos.

El nuevo Ebro s700 proporciona gran funcionalidad
Según señaló el Deputy CEO de Ebro, Jorge Susaeta, ya tienen 12 puntos de venta en las principales ciudades españolas, pero esperan llegar a los 50 al inicio del próximo cuatrimestre. Además, en 2025 también está previsto que abran un centro de investigación en Barcelona.
Los próximos pasos para Ebro serán la inminente llegada del s800 –el «hermano mayor» del Ebro s700, de siete plazas– y, para el segundo trimestre del año, el todocamino compacto s400. Con todo ello, desde Ebro se han marcado el objetivo de cerrar el año vendiendo entre 20.000 y 25.000 unidades, según deslizan.