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Vidas ejemplaresLuis Ventoso

Sándwich Peter a la Plancha

Su discurso al contraataque en el Congreso fue la mortadela entre las rebanadas de las acusaciones de Aldama y el rejonazo de la juez al maestro Azagra

Actualizada 13:48

Existe una seudo derecha que para salvar la cara ante el rodillo de la izquierda en el mundo cultural recurre a la estratagema de ir de rompedora y repartir a diestra y siniestra. Palo al PP, palo al PSOE, palo a Vox. Es lo que podríamos denominar como alatristismo. Los que cultivan esa técnica suelen elogiar de cuando en vez la capacidad de resistencia de Sánchez («un personaje fascinante, valiente, tenaz, atrevido»). Lo critican, sí, pero reservan también ciertos elogios a su figura, no vaya a ser…

Siento decir que no encuentro un solo aspecto positivo en Sánchez. Me parece un personaje despreciable. Lo volvió a demostrar ayer en el Congreso. Un presidente que se lavó las manos ante una dantesca catástrofe y se la empaquetó al Gobierno regional, un cobarde que huyó de una protesta vecinal dejando tirados a los Reyes, un mentiroso que afirmó que en Paiporta hubo una conjura organizada por activistas de extrema derecha (falsedad desmentida por la Guardia Civil)… pues ese tipo va y tiene el cuajo de soltar en sede parlamentaria que la tragedia de Valencia atiende al negacionismo climático del PP y Vox.

¿Qué estupidez es esa? Mazón llegó al poder en julio del año pasado. ¿Qué podía haber hecho en tan corto plazo para evitar las supuestas consecuencias del cambio del clima? Por otra parte, ha habido desbordamientos en el barranco del Poyo en 1321, 1328, 1340, 1358, 1406, 1427, 1475, 1517, 1540, 1581, 1589, 1590, 1610, 1651, 1672, 1731, 1775, 1783, 1845, 1860, 1864, 1870, 1897 y 1957. ¿Ya existía entonces el cambio climático provocado por el hombre? Las crónicas recogen un gran número de muertos en la riada de 1795. ¿Se produjeron también por el abominable «negacionismo climático» de PP y Vox? ¿No ha tenido consecuencias el hecho de que el Gobierno de Sánchez no acometiese ninguna obra preventiva en la zona, por prejuicios ecologistas y por pura incompetencia y desidia?

Sánchez saltó gallo y peleón al Congreso, donde se dignó a hablar de la DANA un mes después. Pero su pólvora sofista fue solo la mortadela en el Sándwich Peter a la Plancha, compuesto por dos panes chamuscados en la inclemente parrilla de la actualidad.

La primera rebanada del sándwich llegó a primera hora de la mañana, cuando Aldama se despachó en una pasmosa entrevista en la cancha de Carlos Herrera, que se anotó un gran tanto periodístico. El intermediario que nutría el choriceo del PSOE soltó algo que creíamos reservado para las pelis de gánsteres de Scorsese y Coppola: Aldama expresó que teme por su integridad física y la de su familia, porque ve al Gobierno capaz de todo. De propina, aseguró que ya está aportando en los juzgados pruebas de todas las mordidas que ha apuntado.

Tras la mortadela del desahogo de Sánchez en el Congreso llegó a la hora de comer la segunda rebanada de pan chamuscado del Sándwich Peter a la Plancha: El Debate adelantaba en una información de Alejandro Entrambasaguas que el maestro David Azagra, el hermanísimo enchufado en la Diputación socialista de Badajoz por Mi Persona, tendrá que declarar ante la juez como imputado y explicar además de donde ha sacado 1,4 millones, cifra insólita para un músico que apenas ha rascado pelota en sus 50 años de vida.

Por último, la felicidad de Ferraz al haber logrado forzar la dimisión de Lobato es quizá un tanto prematura. Ahora el decapitado declarará mañana ante el Supremo liberado del deber de lealtad al régimen sanchista. Es decir, puede que se sume a Aldama en el coro que ha empezado a vocear el Caso PSOE en tempo allegro molto vivace.

El fin de semana veremos en el Congreso del PSOE un colorido circo de alegría impostada, desafíos retadores, sonrisas de pega… Igual hasta acude Bego, nuestra la cuádruple imputada, a darse un garbeo «progresista». Pero la verdad es que Mi Persona, con toda su efigie marmórea, está más quemado que el embrague de aquel Talbot Samba con el que aprendí a conducir en los ochenta.

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