Fundado en 1910
HorizonteRamón Pérez-Maura

Lo que va de Sánchez a los Reyes

Hay una realidad y es que, aunque se pueda cuestionar en algunos momentos la forma en que Zarzuela gestiona su relación con un Gobierno hostil por primera vez desde la reinstauración de la Monarquía en 1975, para el pueblo español los Reyes son un referente nacional y cuentan con respaldo popular incuestionable

Ayer tropecé con un programa de TVE en el que mostraban a una multitud de jóvenes que coreaban gritos e insultos contra Pedro Sánchez. Esos jóvenes que eran tan positivos y progresistas cuando insultaban a Aznar y Rajoy se han vuelto intolerantes cuando insultan a Sánchez. No seré yo quien defienda el insulto en ninguna circunstancia. Me parece inaceptable su uso en cualquier contexto y en especial en la política, que implica una convivencia. Pero o lo denunciamos en todo momento o no hay prohibición posible.

Esta denuncia en Televisión Española de los ataques a Sánchez se producía en el mismo momento en que los Reyes iniciaban sus visitas a las zonas arrasadas por los fuegos. Y comenzaban por Sanabria donde eran recibidos con vítores por la población, indiferente a la presencia del presidente regional y de una ministra de jornada -por más que les moleste el término.

Ésta es la gran diferencia que hay hoy en España y que Sánchez no puede soportar. El pueblo, sí EL PUEBLO, quiere a su Rey e insulta a su presidente populista de extrema izquierda. Se puede criticar todo radicalismo, pero sería más útil empezar por preguntarse por qué se dan esas reacciones tan radicalmente opuestas frente a la realidad que vivimos.

Admito que yo escribí en estas páginas días atrás que creía que los Reyes debían haber acudido antes a las zonas afectadas por los incendios. Y discrepo de la teoría de que el Rey no se puede mover dentro de España sin el consentimiento expreso del Gobierno. Sí comprendo que no quiera tener más conflictos con Sánchez porque la situación es lo suficientemente tensa. Pero me parece que lo que vimos ayer y probablemente veamos hoy y mañana es suficientemente relevante. El calor de la recepción a los Reyes ha seguido siendo igual de revelador. Y el desprecio de Sánchez, inverosímil. En lugar de quedarse en su despacho en La Moncloa después de tres semanas en la tumbona de La Mareta, se han largado de vacaciones a Andorra. Que, por cierto, hace falta mal gusto. Porque Andorra la Vella -digámoslo en catalán dado que es la lengua oficial y no gusta que se traduzca al castellano- es de los sitios más feos en los que he estado en mi vida. Y tengo una mijita de mundo recorrido.

Hay una realidad y es que, aunque se pueda cuestionar en algunos momentos la forma en que Zarzuela gestiona su relación con un Gobierno hostil por primera vez desde la reinstauración de la Monarquía en 1975, para el pueblo español los Reyes siguen siendo un referente nacional y cuentan con un respaldo popular incuestionable.

Un buen amigo, más monárquico que yo si es que eso es posible y que ha tenido puestos de carrera muy relevantes en el organigrama del Reino de España me decía el martes a mediodía: «Sumido en mi realista pesimismo, me llegan muy fidedignas señales de viva inquietud en Zarzuela sobre las tardías y ‘consensuadas’ visitas regias a las zonas incendiadas, anunciadas para mañana, pasado y al otro. El temor se refiere especialmente a que Moncloa, igual que ha tendido, con éxito, la trampa a Génova de los reproches mutuos, ‘se haya asegurado de que haya afectados que pongan en algún apuro a los Reyes’ a fin de conseguir lo mismo: la gente no solo increpa a Sánchez sino a todo el mundo, incluido el Monarca. Veremos.»

A la hora de redactar esta columna no parece que haya ocurrido nada ni siquiera próximo a ese justificado temor. Pero aún quedan dos días. Si en Rusia eran capaces de escenificar muestras de amor y lealtad al Zar a su paso por aldeas en estado decrépito, ¿qué no sería capaz el sanchismo de hacer en sentido contrario en la España del siglo XXI? Aquí los agitadores se pueden vender muy baratos para ser pólvora contra el Rey pagados con pólvora de Rey.

comentarios
tracking

Compartir

Herramientas