El secreto revelado

Me viene a la memoria, al discurrir sobre los motivos de la condena del fiscal general, su diferente comportamiento frente al que tuvo el general de la Guardia Civil Pérez de los Cobos, que por guardar el secreto profesional en misión de investigación judicial, en el caso de la actuación oficial, el 8-M, que ocasionó múltiples contagios del COVID, fue destituido de su cargo por el ministro Marlaska. García Ortiz vulneró la ley, si bien se guardó de confesar que lo había hecho por obediencia debida a un superior, pues bien sabía que por ser ilícita la revelación de secretos no le hubiese servido de eximente y además habría cargado con la ira del mandatario.

Es el caso que mientras Pérez de los Cobos obtuvo el aplauso de su conciencia, cargó con la ira del ministro, que le destituyó injustamente, García Ortiz no estará conforme con su conciencia y la justicia le ha condenado, pero con el aplauso de quien le ordenase esa revelación de secretos con tal de ganar un relato contra una adversaria política. Lo prueba su acatamiento a regañadientes con crítica achacable a la democracia. Y la división de poderes en la tumba de Montesquieu.