Papa Francisco en la basílica de San Pedro
El Papa Francisco acude a una cárcel de mujeres de Roma para celebrar la misa del Jueves Santo
El Santo Padre llegó a la cárcel, la mayor femenina de las cuatro de todo el país, al rededor de las cuatro de la tarde
El Papa Francisco ha acudido este Jueves Santo a la cárcel de mujeres de Rebibbia, situada en Roma, para celebrar la misa In Coena Domini –En la Cena del Señor–. Las reculsas, el personal y los agentes han recibido al Santo Padre entre aplausos.
Como ocurrió el pasado año en una cárcel masculina, está previsto que el Santo Pontífice lave los pies a 12 reclusas imitando el gesto de Jesús de Nazaret con sus discípulos en la Última Cena, que se conmemora este Jueves Santo.
El capellán del centro, Andrea Carosella, ha reconocido al medio oficial Vatican News que este será «un momento hermoso que las reclusas esperan con nerviosismo» porque fueron ellas las que invitaron al Santo Padre a la cárcel. Además, ha reconocido que para las mujeres la visita del papa es «una señal de gran atención a la realidad» y de gran ánimo.
El Papa Francisco ya está en el centro penitenciario. El Santo Padre llegó a la cárcel, la mayor femenina de las cuatro de todo el país, al rededor de las cuatro de la tarde. Como es habitual, iba en silla de ruedas, ya que tiene problemas de movilidad. Cuando llegó a la puerta principal, decenas de mujeres le acogieron, le besaron sus manos y le ovacionaron.
De este modo, el Sumo Pontífice continúa con una tradición iniciada con su pontificado, en 2013. Desde el año mencionado no celebra misa en la catedral romana de San Juan de Letrán, sino que prefiere acudir a lugares de sufrimiento. En este sentido, en sus 11 años de pontificado ha celebrado la misa In Coena Domini generalmente en cárceles, pero también en centros de acogida para refugiados, en correccionales de menores o en residencias, con los enfermos.
Su primera Semana Santa en Roma como Papa, en 2013, acudió a la prisión romana para menores de Casal del Marmo, a la que volvería una década después, en 2023, apenas una semana después de recibir el alta por una bronquitis que le tuvo tres días hospitalizado.
En la mañana de este Jueves Santo, el Pontífice argentino ha abierto los ritos del triduo pascual de la Semana Santa en la basílica de San Pedro del Vaticano con la misa crismal, en la que se conmemora la institución del sacramento del orden sacerdotal.
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