¿Por qué no deberías ducharte con agua fría durante una ola de calor?

La primera ola de calor del verano azota la península. Todas las comunidades autónomas están este lunes, 30 de junio, en alerta por temperaturas máximas. Según la previsión de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), los valores más altos se alcanzarán en Sevilla (42 °C), Zaragoza, Lérida, Córdoba y Badajoz con 41 °C

Así, se ha activado el aviso naranja por altas temperaturas en Andalucía, Aragón, Cataluña, Extremadura, Galicia, Navarra, País Vasco, La Rioja y Comunidad Valenciana. Además, se ha declarado la alerta amarilla por calor en varias zonas, entre ellas la isla de Gran Canaria, en Canarias, así como en Asturias, Baleares, Cantabria, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Comunidad de Madrid y Murcia.

Por todo ello, los españoles buscamos miles de fórmulas para tratar de regular su temperatura corporal y capear esta racha estival.

¿Ducha fría para combatir el calor?

Son muchos los que optan, especialmente antes de irse a la cama para poder dormir mejor, por una ducha refrescante. Sin embargo, los expertos aseguran que esta no es la mejor opción, ya que nuestro cuerpo percibirá que la temperatura del agua está por debajo de la corporal y empezará internamente a generar más calor.

Según la doctora María José Martínez, coordinadora del grupo de trabajo de cronobiología de la Sociedad Española del Sueño (SES), «Aunque parezca contradictorio, si aplicamos calor sobre la piel favorecemos que los vasos sanguíneos se abran, dilaten y entonces expulsen el calor». Esta es la forma con la que el cuerpo se enfriará y podremos conciliar el sueño.