Cristina Rosi, la mujer italiana que ha permanecido once meses en coma
Un infarto deja en coma a una embarazada que dos años después por fin conoce a su hija
Cuando estaba en el séptimo mes de gestación sufrió un infarto que le provocó graves daños neurológicos a ella y a su bebé
La trajo al mundo, pero nunca se habían visto. Por fin, dos años después, madre e hija se reencuentran. Una historia de superación que comienza en julio de 2020 cuando el corazón de Cristina Rosi se detiene durante unos instantes. La mujer sufre un infarto en el séptimo mes de embarazo, lo que obliga a los médicos a practicarle una cesárea de urgencia para salvar la vida de la pequeña Caterina. En el impasse de tiempo entre la vida y la muerte, la falta de oxígeno provoca graves daños neurológicos a madre e hija. Ahí da comienzo un dramático camino de curación, lejos la una de la otra.
A través de una colecta, el marido de Cristina, Gabriele Succi, recauda el dinero necesario para costear los tratamientos de su mujer en una clínica especializada en Austria. Cristina permanece en coma durante mucho tiempo, mientras su hija sopla en Italia, junto a su padre, las velas de su primer año de vida.
Diciembre de 2021. La vida le da una segunda oportunidad a Cristina, quien abre los ojos después de once meses en coma. Sus primeras palabras: «Mamá». Por su parte, Caterina también comienza a interactuar: «Necesita tiempo, pero la situación ha mejorado», explica Gabriele Succi, su padre.
Este domingo, Cristina pasará unas horas en casa para reencontrarse con su bebé. Luego, la trasladaran al instituto Agazzi de Arezzo (Italia) donde permanecerá hasta completar su rehabilitación.
La familia se enfrenta ahora al siguiente paso: la dura batalla de cuidar a madre e hija. Por eso, han habilitado el hogar con todo lo necesario para poder albergar al personal sanitario que deberá atenderlas.
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