Fundado en 1910
Voluntarios y usuarios de la Fundación Why Not

Voluntarios y usuarios de la Fundación Why NotThorun Javier Piñeiro

Why Not, la fundación que rompe barreras en la salud mental: «Consigues metas que antes no creías posibles»

El día a día es dinámico y diverso, de manera que los usuarios pueden asistir a clases de idiomas y otros ámbitos, como Historia del Arte o yoga

Por muy pequeño que sea el movimiento, si se hace desde el corazón, suele llegar lejos. Esto es lo que ha sucedido con Why Not, una fundación que nació en junio de 2010 en San Sebastián con el objetivo de mejorar la calidad de vida de las personas con problemas de salud mental y sus familiares. Ahora, 14 años después, han dado un paso más al abrir un local en la capital porque, aunque «lo psico asuste», es una buena forma de desestigmatizar la enfermedad y acercar a la sociedad una realidad que, por desgracia, sigue a la sombra.

Hace justo un año, el 1 de febrero, Why Not Madrid abrió sus puertas gracias a Tilda Benjumea, directora del centro. No fue fácil, pero gracias a tocar la puerta de distintos hospitales y centros de salud mental como La Paz, el Infanta Sofia, el Gregorio Marañón o el Clínico San Carlos, entre otros, lo hicieron realidad. Sin embargo, aún necesitan más ayuda, porque, como dice Tilda, «todo el mundo debe enterarse de que existe esta oportunidad».

Un espacio para compartir y crecer

El día a día en Why Not Madrid es dinámico y diverso. Las personas mayores de 18 años que acuden de forma gratuita encuentran un espacio donde cada turno es diferente. Como si de una escuela se tratase, se imparten talleres de inglés, de italiano, escritura, Historia del Arte, cinefórum, yoga, memoria, radio, escapadas a diferentes sitios… Sin embargo, con una diferencia: «La experiencia de compartir con compañeros que inspiran y motivan», explica uno de los asistentes. Para él este espacio es un buen lugar para relacionarse «con mucha naturalidad».

Uno de los usuarios es José Ignacio, que recuerda sus primeros días con un cariño especial: «Mi acogida por Paula y Tilda fue muy buena». A medida que fue descubriendo los talleres, comenzó a sentirse mejor y más acompañado. Lo mismo ocurrió con Juan que, mediante la Historia del Arte, descubrió un nuevo mundo «te lleva a mundos que tú nunca habías pensado antes que podías llegar. Te hace conseguir metas que tú antes no creías posibles», recuerda emocionado.

Coloquio con la Fundación Why Not Madrid

Coloquio con la Fundación Why Not MadridThorun Piñeiro

Voluntarios que cambian vidas

Esto es posible gracias a personas como Álvaro Durán y María García Courel, dos voluntarios que, además de sus trabajos, se dedican a impartir charlas de Historia del Arte y cinefórum, respectivamente. Lo que comenzó siendo un reto para el ‘profesor’ ha terminado siendo «una ayuda mutua». Lo mismo le pasa a María, quien admira la voluntad y el esfuerzo de los usuarios: «Les agradezco mucho cuando vienen, escuchan y participan. Siento admiración por ellos», afirma con una gran sonrisa.

Al hilo, Álvaro recuerda algo fundamental, y es que todo el mundo puede aportar su granito de arena: «El que no tiene tiempo puede ayudar con un donativo». Además, anima a futuros usuarios a probar una de las excursiones que organiza la fundación, porque «se termina haciendo amigos», concluye.

Las enfermedades mentales, las grandes olvidadas

Una de las misiones de la Fundación Why Not es dejar de poner en un segundo plano a la salud mental. «Existe mucha ignorancia y un poco de miedo, a veces por puro desconocimiento», señala Paula Rodríguez Avendaño, coordinadora del centro, quien afirma que «en el momento que esto se normalice», será igual que las demás enfermedades.

Ellos ya lo están haciendo mediante campañas de sensibilización. Cada cierto tiempo van a empresas y centros donde, junto a los usuarios, hablan de cómo es convivir con una enfermedad de salud mental y, mediante diálogo, tratan de concienciar a que la sociedad tome acciones y sepa qué es realmente la salud mental.

Gracias a los voluntarios y las personas como Tilda y Paula, todas las personas que deseen acudir pueden hacerlo. El proceso es muy sencillo: si alguien tiene un problema de salud mental o conoce a alguien, basta con presentarse, rellenar una hoja de inscripción que explique de qué centro psiquiátrico viene y acudir al centro para formar parte de esta «gran familia».

comentarios
tracking