Los españoles ganan altura con el paso de los años: así ha cambiado nuestra estatura desde el siglo XIX

Durante los últimos dos siglos, los españoles han experimentado un notable incremento en su estatura media, especialmente entre los hombres. Este crecimiento físico, reflejo de mejoras en las condiciones de vida, alimentación y salud pública, ha situado a España en una posición destacada, aunque no puntera, dentro del contexto internacional.

En 2019, los varones españoles alcanzaban una altura media de 1,76 metros al cumplir los 19 años, lo que representa un aumento de tres centímetros con respecto a los que llegaron a la edad adulta en 1985, cuya media era de 1,73 metros. La cifra tiene un mayor protagonismo si lo comparamos con los datos registrados hace dos siglos. Tal como confirma un estudio realizado por la red internacional de investigadores NCD Risk Factor Collaboration y publicado en 2020 en la revista científica The Lancet, los hombres españoles crecieron 14 centímetros en dos siglos, cuando la media se situaba en 1,62 metros.

Este avance evidencia un progreso constante, aunque no exento de altibajos. De hecho, entre los años 2004 y 2015 se produjo un retroceso, con una leve disminución de la estatura media, que solo comenzó a recuperarse en el último lustro.

Por el contrario, la evolución entre las mujeres ha sido menos significativa. Las jóvenes de 19 años en España medían de media 1,62 metros en 2019, lo que supone un crecimiento de apenas medio centímetro respecto a los valores registrados en 1985, pero de siete en comparación con los datos de 1850. Sin embargo, en el inicio del siglo XXI se ha observado un ligero descenso, cercano a un centímetro, en su estatura media.

España en la clasificación mundial

Estas cifras sitúan a España en la parte alta de la clasificación mundial, aunque por debajo de numerosos países europeos de su entorno. Los hombres españoles, con sus 1,76 metros, se encuentran por detrás de los griegos (1,79 metros) o los franceses (1,78), pero aún superan a italianos y portugueses (ambos con una media de 1,74). En términos globales, España ocupa el puesto 58, y el 34 en el ámbito continental.

En el caso de las mujeres, la distancia con otros países es mayor. Las españolas de 19 años se sitúan en la posición 77 a nivel mundial, por debajo incluso de jóvenes de países como Estados Unidos o China, cuya media alcanza los 1,63 metros, y también por detrás de mujeres procedentes de regiones africanas como Argelia o Senegal.

La investigación identifica múltiples factores detrás de esta evolución: desde la genética hasta las condiciones ambientales y, sobre todo, los hábitos nutricionales durante la infancia y la adolescencia.

Según los autores del estudio, la posición actual de los adolescentes de Europa Occidental como los más altos del mundo se explica en parte por «la ventaja que ya tenían antes de la última parte del siglo pasado». No obstante, destacan que «las mayores ganancias de altura en las últimas décadas las han experimentado economías emergentes», como es el caso de China, líder en el crecimiento entre los hombres, o Corea del Sur, que ocupa posiciones destacadas en ambos sexos.

Pese a estos avances, el informe también subraya que la tendencia no es uniforme ni irreversible. En España, como en otros países desarrollados, el incremento de la estatura parece haberse estabilizado, con indicios de retrocesos parciales. Esta evolución evidencia que el crecimiento físico de una población no solo responde a la biología, sino también a las condiciones sociales y económicas que marcan cada generación.