La anécdota sigue teniendo un gran peso a día de hoy
Hace dos años, un vecino retrató a Sánchez en Zamora con un grito que sigue vigente: «¿Arreglarlo tú?»
La visita del presidente a la Sierra de la Culebra, arrasada por el fuego, se convirtió en un episodio que simboliza la desconfianza hacia un Gobierno incapaz de frenar la ola de incendios en España
Han pasado dos años desde que un vecino de la Sierra de la Culebra, en Zamora, rompió el guion propagandístico de Pedro Sánchez durante su visita a la zona devastada por las llamas. «¿Arreglarlo tú?», le gritó con la rabia de quien lo había perdido todo, dejando al presidente en evidencia frente a las cámaras y recordándole la falta de confianza que despierta su gestión en los pueblos más castigados.
El incendio arrasó cerca de 30.000 hectáreas y se convirtió en uno de los peores de la historia reciente de España. Pero, más allá de la magnitud del desastre, lo que quedó grabado fue la indignación de unos vecinos que se sintieron abandonados y que vieron en la visita de Sánchez poco más que un acto de escaparate político. Las promesas llegaron, pero las soluciones nunca lo hicieron.
«Ya hemos perdido la Sierra de la Culebra. Ahora queda la de la Demanda. ¡Vete y quémala!», clamó otro vecino, mientras Sánchez intentaba sofocar el malestar con frases vacías: «Lo arreglaremos». La respuesta fue inmediata y contundente: «¿Arreglarlo, tú?». Aquella escena, lejos de ser anecdótica, simbolizó la brecha entre un Ejecutivo instalado en la propaganda y la España rural que arde y se despuebla.
Dos años después, España sufre nuevas olas de incendios que vuelven a arrasar montes y pueblos, mientras el Gobierno repite la fórmula de siempre: declaraciones de «zona catastrófica» y partidas de dinero que apenas alivian el drama. El recuerdo de aquel vecino sigue vigente porque, en realidad, la pregunta resuena con más fuerza que nunca: «¿arreglarlo, tú?»
