Vuelven los televisores pequeños: de rareza en el mercado a pieza clave del salón

Durante años, los televisores de 55 y 65 pulgadas dominaron las ventas mientras los modelos más compactos quedaban relegados a estancias secundarias. Sin embargo, el sector ha dado un giro que nadie esperaba, el de las 42 pulgadas —e incluso formatos muy próximos como 40 y 43”— que se han convertido en el nuevo tamaño comodín con permiso de los que demandan televisores de 100 pulgadas o más.

Los modelos de unas 40 pulgadas son lo suficientemente grandes para disfrutar de cine y series, pero no resultan invasivos en salones pequeños o dormitorios. El problema es que se han vuelto productos escasos porque la industria ha priorizado paneles grandes, y encontrar un televisor realmente compacto con prestaciones de gama alta es cada vez más difícil. Algunas marcas, como Loewe, han visto en este hueco una oportunidad para vender modelos pequeños pero con alma premium.

Loewe

Loewe destaca como la opción boutique del segmento. La firma alemana mantiene su apuesta por la gama alta con la serie Stellar, que incluye un modelo de 42 pulgadas OLED 4K, el Stellar 42 DR+. Equipa un panel WRGB Ultra HD compatible con HDR10 y HLG, además de tasas de refresco que pueden alcanzar los 120 o incluso 144 Hz. Más allá de la imagen, la marca cultiva una estética única con materiales como el aluminio cepillado y un panel trasero que puede ser de hormigón o con acabado lava. A ello se suman prestaciones poco habituales en este rango, como grabación DR+ con SSD interno y doble sintonizador.

En esta línea, Loewe acaba de presentar el We. SEE 42 OLED con un panel OLED Ultra HD de última generación con HDR, incluido Dolby Vision y resolución 4K. El sistema de sonido invisible, integrado en el televisor, ofrece 60 vatios de potencia con Dolby Atmos.

LG

LG es otro referente en las 42 pulgadas, gracias a sus series OLED C4 y C5. Ambos modelos ofrecen contraste prácticamente infinito, negros profundos y colores muy vivos, además de contar con HDMI 2.1 completo y 4K a 120 Hz, una apuesta segura para jugadores de consolas. Para quienes buscan opciones más económicas, la compañía conserva líneas LED y NanoCell en 40-43 pulgadas.

Samsung

Samsung, por su parte, cubre este segmento con modelos LED y QLED, donde las 43 pulgadas se han convertido en su formato clave. En las gamas 2024-2025 destacan la Q60D, un QLED que ofrece buen brillo y funciones inteligentes, y diversas propuestas Mini LED dentro de la familia Neo QLED con un extra de iluminación y contraste. La marca mantiene también líneas más asequibles en 40-43 pulgadas, aunque con menor calidad.

Sony

Sony combina su experiencia en procesado de imagen con una oferta que abarca tanto LED como OLED en tamaños compactos. En el terreno LED, el Bravia 3 de 43 pulgadas es un modelo de gama media con buena fidelidad de color. En OLED, la japonesa ofrece variantes de series como la A90K con tamaños cercanos a 42 pulgadas.

TCL

TCL es una de las marcas con mejor relación calidad-precio en las 40-43 pulgadas. Modelos como el P7K de 43 pulgadas cuenta con un panel LCD, buen brillo y compatibilidad con formatos HDR. La marca apuesta por ofrecer prestaciones interesantes a precios inferiores a los de los fabricantes tradicionales, con el fin de convertirse en la televisión de una estancia pequeña.

Hisense

Hisense completa el mapa con una gama muy competitiva en precio. En 43 pulgadas aparece el 43QD6QF. Ofrece panel LED 4K, compatibilidad con HDR10+ y Fire TV como sistema operativo. En 40 pulgadas, el modelo 40A4H es un televisor LED 4K HD con Android TV, control por Google Assistant y baja latencia para juegos.

En 2025 aparece un mercado que se reconfigura en torno a un tamaño que había perdido protagonismo

En 2025 aparece un mercado que se reconfigura en torno a un tamaño que había perdido protagonismo, pero que vuelve con fuerza. Loewe representa la exclusividad para quienes buscan diseño refinado y funciones avanzadas en 42 pulgadas. LG domina el terreno OLED por equilibrio entre calidad y precio. Samsung y Sony suman a la oferta LED y QLED para quienes prefieren un televisor luminoso. TCL conquista el segmento por su valor y sus precios bajos, mientras Hisense se posiciona como la opción funcional. Aunque parecía que los paneles gigantes habían acaparado todo, las 42 pulgadas vuelven a reclamar su lugar como el tamaño perfecto para el hogar moderno y pequeño.