Ilustración de fósiles al lado de un río
Desde armadillos gigantes a una nueva especie: encuentran un 'cementerio' prehistórico de fósiles bajo EE.UU.
Con el paso de los años, los científicos han ido descubriendo indicios y señales de lo que era nuestro planeta en la antigüedad y de las criaturas que lo habitaban. En muchos casos, las distintas investigaciones que se han llevado a cabo han revelado especies totalmente desconocidas en la era actual.
Muchas de ellas fueron halladas hace casi tres años, en Estados Unidos. Los coleccionistas de fósiles Robert Sinibaldi y Joseph Branin realizaron un hallazgo extraordinario en el lecho del río Steinhatchee, en Florida. A lo largo de una de sus investigaciones habituales, Sinibaldi y Branin descubrieron más de 500 fósiles de animales correspondientes al periodo Irvingtoniano medio del Pleistoceno. Es decir, hace aproximadamente medio millón de años.
«Por primera vez, encontramos individuos con dientes superiores, inferiores y frontales bien preservados», dijo Richard Hulbert, autor principal del informe.
Río Steinhatchee, en Florida
Lo realmente llamativo de este descubrimiento es la riqueza histórica que supone, ya que no es habitual el hallazgo de fósiles de este época en América del Norte. Tal como han detallado los investigadores, estas especies –que serían similares a caballos, perezosos y armadillos– cayeron en un sumidero y acabaron muriendo. Este lugar se llenó de sedimentos a lo largo del tiempo, preservando los restos de los animales hasta que fueron descubiertos.
Una diversidad digna de estudio
Entre los 552 fósiles recuperados, destaca la presencia predominante de caballos primitivos del subgrupo caballine, similar al de la mayoría de los caballos actuales. Aproximadamente el 75 % de los restos pertenecen a esta especie, lo que sugiere que estos eran realmente abundantes en la región durante el Pleistoceno.
«Si el entorno hubiera sido más boscoso, habríamos encontrado más fósiles de mastodontes o ciervos», explicó el investigador.
Fósiles de caballos recuperados del río Steinhatchee
De igual manera, además de los caballos, los investigadores identificaron fósiles de otras especies muy significativas. Entre los restos destacan los de Holmesina floridanus, un armadillo gigante que apareció en Florida hace aproximadamente dos millones de años. Para hacernos una idea de su tamaño, llegó a pesar casi 100 kilos –superando en gran medida el peso medio actual–.
Fósiles de Holmesina, una especie armadillo gigante
Otro descubrimiento novedoso fue el hallazgo de un cráneo de tapir, que pertenecerían a una nueva especie. «Podría tratarse de una nueva especie, pero también podría ser simplemente un individuo con características inusuales dentro de su población», advirtió Hulbert. Asimismo, los investigadores encontraron restos de un género concreto de perezosos terrestres gigantes que habitaban América del Norte durante el Pleistoceno.
Hueso de la mandíbula inferior de un tapir, que podría representar una nueva especie
La colaboración entre coleccionistas aficionados y científicos ha sido fundamental en este hallazgo. Sinibaldi y Branin, experimentados en la búsqueda de fósiles, notificaron su descubrimiento al Museo de Historia Natural de Florida, lo que permitió una investigación más detallada del sitio.
¿Una zona rica en fósiles?
El yacimiento del río Steinhatchee continúa siendo objeto de estudio. Los paleontólogos esperan encontrar más restos que puedan arrojar más detalles sobre la fauna del Irvingtoniano medio. Además, el posible descubrimiento de nuevas especies, como el tapir mencionado anteriormente, podría redefinir nuestra comprensión de la biodiversidad prehistórica en América del Norte.
Restos de los perezosos terrestres gigantes encontrados en el río Steinhatchee
De hecho, hace escasos meses tuvo lugar un nuevo descubrimiento fósil en el país norteamericano. William McGhee, un joven de 25 años, encontró restos fósiles de millones de años de antigüedad mientras buceaba en un río de Carolina del Norte. Durante su exploración, descubrió dientes de tiburón y conchas de vieiras. Fue realmente llamativo el hallazgo de esta segunda especie, ya que se habría extinguido hace millones de años.