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Emilio del Río, escritor y divulgador de humanidades, presenta su nuevo libro `Carpe Diem´Paula Argüelles

Carpe Diem: Autoayudate con los clásicos

Emilio del Río: «Los clásicos ya enseñaban autoayuda de la buena y de forma divertida»

Emilio del Río, escritor y divulgador, lanza su nuevo libro ‘Carpe Diem’ donde, a través de los clásicos, ofrece enseñanzas sobre el sentido de la vida de una forma divertida y accesible

Las grandes respuestas a los interrogantes que todo ser humano se hace en su vida, los problemas a los que se enfrenta o la fugacidad del tiempo ya las dieron los clásicos como Cicerón, Marco Aurelio, Séneca, Horacio o Epicteto. Esta es la premisa con la que el humanista, Emilio del Río, parte en su nuevo libro Carpe Diem: Autoayúdate con los clásicos. Un libro que lejos de ser un manual de autoayuda -que están muy de moda hoy en día- pretende ser «una guía práctica con consejos» que ayuden a la gente en su día a día y les haga «ser mejores personas».

Un relato ameno que, a través de las citas de los grandes clásicos de la Historia, acerca las grandes reflexiones del ser humano al público generalista de una forma divertida, fácil y entretenida. Así, este nuevo libro de Emilio del Río a los clásicos a la sociedad actual y demuestra cómo ellos ya «respondieron a las grandes preguntas de la condición humana».

En realidad, Carpe Diem, son las propias anotaciones de los clásicos que del Río ha ido haciendo a lo largo de su vida y con las que pretende crear «una guía práctica para ser feliz».

–¿Carpe Diem es un libro de autoayuda?

Quería hacer una sátira de los falsos manuales de autoayuda y, al final, me ha salido un manual de autoayuda pero de la buena. El libro se basa en los clásicos: Séneca, Marco Aurelio, Epicteto, Homero, Cicerón...Se trata de buena literatura que te sirve y te ayuda para la vida. He tomado notas durante muchos años y ahora las comparto con los lectores. Estas obras me han servido para encontrar el camino de la felicidad y ser mejor persona.

–A mucha gente le dará pereza leer a los clásicos porque los encuentran distantes o difíciles de comprender, ¿qué les dirías?¿qué van a encontrar en Carpe Diem?

Que lean Carpe Diem porque se van a dar cuenta que los clásicos son divertidos y que sirven para encontrar el bienestar emocional. Por ejemplo, ahora parece que hemos descubierto la alimentación sana, el ejercicio físico, el bienestar emocional, pero esto tiene 3.000 años: Mens Sana in corpore sano. Las respuestas a las grandes preguntas que nos hacemos ya las dieron los clásicos grecolatinos.

Es un libro práctico para ser feliz y mejor persona. Quiero que sea útil al lector.

–¿Hemos inventado algo que los clásicos no hubiesen descubierto?

Desde el punto de vista de la condición humana, no. Esto ya lo dijo Séneca: «Quienes antes que nosotros abordaron estas cuestiones, no son dueños, sino guías de nuestra mente».

El estoicismo, el epicureísmo ya han dicho mucho sobre la condición humana. También hay otros como Homero o como Ovidio que escribe Las Metamorfosis donde habla de esto, de que la vida es cambio. Este concepto luego lo formaliza Heráclito: todo fluye y todo cambia. Otra de las enseñanzas las da Tito Livio, por ejemplo, que habla de los valores que tiene que tener el ciudadano.

–En el libro hay una cita de Séneca: «Vivir es combatir», ¿cómo lo aplicarías a la sociedad de hoy en día?

De hecho esta frase es el primer capítulo del libro. Muchos trasladan la idea de que el estoicismo es resignación. Esto no es así. Esta frase quiere decir que vivir es caerse y levantarse, que no hay que resignarse ante lo que te pasa. En la vida hay momentos muy difíciles a los que te tienes que sobreponer. Ahí entra en juego tu equilibrio, tu serenidad y tu libertad interior.

–Marco Aurelio también habla del cambio en la vida...

Sí. También dice la vida se parece más a la lucha que a la danza. Él estuvo toda la vida combatiendo en los límites del imperio. Marco Aurelio defiende la alegría como una trinchera, como un principio, como una bandera o un destino. Esto también lo dice Séneca. No hay que estar dolientes por las esquinas. Esto en La Vida de Bryan de los Monty Python ya aparece: «busca el lado positivo de la vida». Hasta en lo peor hay que buscar siempre la parte buena.

–Con el contexto actual, con la crisis de vivienda muchos jóvenes no ven fácil su futuro. ¿Cómo se le dice a alguien: sé feliz, aprovecha el momento?

Vivir es combatir. Tienes que tener serenidad, equilibrio interior. El dinero no quita la felicidad. No la da, pero tampoco te la quita. Está claro que si tienes ciertas comodidades vas a vivir mejor, pero no hay que tener ansia viva. ¿Para qué acumular cosas si no te las vas a llevar a la tumba? No hay que tener ansiedad por las cosas materiales, aunque no quiere decir que no luches para no tenerlas. Hay que buscar el equilibrio interior y esto se entrena.

–Otro de los grandes temas del libro es la muerte

Hay que saber que nos vamos a morir y que no se trata de llorar por las esquinas. Es la muerte la que da sentido a la vida. Sabiendo esto hay que ser felices, hay que darle sentido a esto. Eso es Carpe Diem, disfrutar de este regalo maravilloso que es la vida. Ni temer ni anhelar el último día, esto lo decía Marcial el poeta hispano-latino.

Pero todo en la vida en su justa medida, nada en demasía. Necesitas trabajar, pero no te puedes pasar todo el día trabajando. También nos gusta el ocio, pero no puedes entregarte a eso todo el día o todos los días. Cicerón ya dice que el ocio con dignidad. Osea que el ocio no es no hacer nada, sino hacer otras cosas. Esto es, ser felices y buscar el equilibrio: nada en demasía.