Fundado en 1910
Menú
Cerrar

Xavi Hernández entra en la sala de prensa de la Ciudad DeportivaEFE

A Xavi se le empieza a poner cara de Koeman

El de Terrassa acumula estadísticas similares a las del holandés en sus trece primeros encuentros. En apenas dos meses, el conjunto azulgrana ha quedado eliminado en Champions, ha dicho adiós a la Copa y a la Supercopa y ve cómo el Madrid se escapa en Liga

El 8 de noviembre de 2021 el Camp Nou recibía con todos los honores a Xavi Hernández. Volvía el hijo pródigo un estadio entregado que veía en el de Terrassa la solución a sus problemas. Con Xavi sobre el césped, los aficionados culés creyeron que la crisis de resultados y de entidad que atravesaban había llegado a su fin. Quizás por eso, Laporta se arrancó a cantar junto al nuevo técnico culé en una imagen que quedará para la posteridad.
78 días después, a Xavi Hernández se le está poniendo cara de Ronald Koeman. Se cuenta en los mentideros que si el entrenador del equipo blaugrana no fuera el eterno ‘6’ su cargo estaría más que cuestionado. Y es que los números no engañan: De los 13 partidos disputados hasta el momento, con Xavi el equipo blaugrana ha conseguido cinco victorias- ante Espanyol, Villarreal, Elche, Mallorca, Linares), cuatro empates y cuatro derrotas y 18 goles a favor y 18 en contra.
Ver más
Los 13 partidos del Barça de Koeman esta temporada: 5 victorias (Real Sociedad, Getafe, Levante, Valencia, Dinamo Kiev) 3 empates 5 derrotas. 17 goles a favor y 18 en contra.
Un grupo que, dos meses después, pese al cambio de entrenador sigue arrastrando las mismas carencias.
El club se ha despedido de la Champions, ha caído en la Supercopa ante el Real Madrid, ve cómo el equipo blanco lidera la Clasificación de la Liga donde le aventaja en 17 puntos en Liga y ha dicho adiós a la Copa del Rey ante el Athletic en San Mamés. En resumen: el Barça, en enero, tiene poco a lo que aferrarse. 

El 'efecto Xavi' se diluye en dos meses

El Barça de Xavi Hernández lejos de arrancar, se puede decir que no carbura. El equipo, a pesar de la recuperación de lesionados, de la llegada de históricos como Dani Alves y jugadores para el presente y el futuro, como Ferran Torres, y del hecho de disfrutar de una tolerancia con la que no contaron sus antecesores ha regresado a la casilla de salida.

Un equipo estancado 

Xavi era muy consciente del club en el que aterrizaba. Un club que nada tenía que ver con el que dejó cuando era futbolista. Es cierto que el Barça de Xavi juega mejor que el de sus antecesores más inmediatos, pero sigue sin rendir al nivel requerido y los resultados continúan sin llegar. Y por si fuera poco, el club ha decidido apostar todo a la salida de Dembélé, un jugador que podría ayudarles a remontar el vuelo. Una salida que puede salirles muy cara, tanto en lo deportivo como en lo económico.